Aunque a veces usado únicamente para un buen brindis, cada vez se utiliza más como elemento principal para las comidas. Gracias a su versatilidad puede ensalzar una gran variedad de sabores y maridar con todo tipo de comidas.
Como en muchas otras ocasiones, esta bebida espumosa surgió por un accidente, debido a que los monjes franceses en la región de Champagne embotellaban el vino una vez terminado el proceso de fermentación y tapaban las botellas con tapones de madera o caña. Lo que a simple vista no notaban era que, además del vino, aún quedaban levaduras y algo de azúcar, por lo que en el interior de la botella continuaba el proceso de fermentación y eso originaba que el vino tuviera burbujas y, en muchos casos, que las botellas explotaran a causa de la presión del gas carbónico. Este fenómeno le hizo ganarse el nombre de «vino del diablo».
Se recomienda servirlo entre 4 y 6 ºC para que pueda ser mejor apreciado, y las burbujas nos hablan de su calidad: cuanto más pequeñas sean y mayor permanencia tengan en la copa, más calidad tiene el vino.
Sea en el aperitivo, en el plato principal, como postres o en cualquier celebración, cada vez se bebe más espumoso. Su carácter fresco, desenfadado y festivo es el compañero ideal.
D.O. Cava
11,5º
Precio: 14,50 €
Esta cava de Sant Sadurní d´Anoia produce vinos espumosos desde el 1926 y es una de las pioneras en lograr los certificados de vinos y cavas ecológicos para sus caldos. No para de cosechar premios a todos los niveles gracias a un buen saber hacer de sus productos artesanales siguiendo la metodología champenois.
Este cava espléndido, de color amarillo verdoso, con burbuja muy fina, es una explosión de sabores. En nariz destacan el melocotón y la manzana. Es elegante y complejo. En boca destacan las notas de crianza con sabores a frutos secos y leves tostados. Largo y amable. Especial para una buena carne al horno, arroces o pasta y salsas blancas.