Los farmacéuticos comunitarios europeos reivindican el potencial de la sustitución y la formulación magistral contra las faltas de medicamentos en determinadas situaciones
Las farmacias europeas ofrecen una amplia y creciente cartera de servicios farmacéuticos, con prioridades definidas en ámbitos como la seguridad y eficiencia, el fomento de la adherencia a los tratamientos o la gestión de la cronicidad.
Las 160.000 farmacias y los 400.000 farmacéuticos comunitarios de toda Europa están siendo un pilar fundamental de los sistemas sanitarios comunitarios para combatir el coronavirus. Las estrategias nacionales sanitarias están siguiendo recomendaciones de instituciones como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), de potenciar el papel de los farmacéuticos en esta crisis con el fin de optimizar los recursos sanitarios, así como de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que aconseja recurrir a los farmacéuticos para que presten asesoramiento de primera línea al público y resuelvan las dificultades de la cadena de suministro, a fin de reforzar la respuesta de los sistemas sanitarios al coronavirus.
La Agrupación Farmacéutica Europea (PGEU) ha hecho público un «Posicionamiento sobre desabastecimiento de medicamentos» en el que pide que se tenga en cuenta el interés del paciente antes de desarrollar medidas que afecten al correcto suministro de medicamentos, en línea con lo solicitado por el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos.
La Agrupación Farmacéutica Europa (PGEU) ha hecho público su Informe Anual 2018 en el que repasa la evolución de la farmacia comunitaria en Europa a lo largo del pasado año, en que estuvo presidida por el presidente del Consejo General de Farmacéuticos, Jesús Aguilar. En palabras de Aguilar, 2018 fue un año en el que la farmacia europea «avanzó promoviendo el avance en el rol del farmacéutico como experto en el medicamento y la provisión de servicios asistenciales para mejorar la salud de la población».
La Agrupación Farmacéutica Europea (PGEU) ha presentado el documento «Farmacia 2030: una visión para la farmacia comunitaria en Europa», que pone de manifiesto la labor que desarrollan las farmacias europeas y propone una serie de acciones que permitirían fortalecer y hacer más sostenibles los sistemas sanitarios.