Farmamundi pone en marcha cinco proyectos con un destacado componente de agua y saneamiento en Nicaragua y Guatemala

Farmamundi celebra el Día Mundial del Agua apoyando la campaña “La valoración del agua” de Naciones Unidas, que cumple su 1º aniversario desde que se inició la pandemia por COVID-19. Asimismo, pone en marcha cinco proyectos con un destacado componente de agua y saneamiento, cuatro de ellos en Nicaragua y uno en Guatemala.

Farmamundi pone en marcha cinco proyectos con un destacado componente de agua y saneamiento en Nicaragua y Guatemala
Farmamundi pone en marcha cinco proyectos con un destacado componente de agua y saneamiento en Nicaragua y Guatemala

Saneamiento básico en comunidades indígenas de Guatemala

Según explica el director de proyectos de cooperación al desarrollo de Farmamundi, Emilio Oriola, «se van a instalar 152 letrinas y 22 sumideros para la disposición de aguas grises con el objetivo de asegurar la accesibilidad y disponibilidad de servicios de calidad de saneamiento en cinco comunidades indígenas de Santa Lucia Utatlán». Concretamente, estas acciones se llevarán a cabo junto a la Asociación Servicios para el Desarrollo (SER) para mejorar la salud, especialmente de mujeres en edad reproductiva, niñas y niños menores de 5 años como grupos más vulnerables».

Por otro lado, también se va a fortalecer la gestión equitativa y sostenible de los sistemas de saneamiento a nivel comunitario y municipal, con la constitución de cuatro nuevas organizaciones gestoras. Este proyecto estará financiado por la Diputación General de Aragón y desarrollará actividades para mejorar los hábitos de salud e higiene en la población y escolares de las comunidades.

Acceso al agua potable en Kukra River, Nicaragua

En Nicaragua están en marcha cuatro proyectos de salud integral donde destacan las acciones para la mejora del acceso al agua potable segura y las condiciones de higiene y saneamiento ambiental en 15 comunidades del territorio de Kukra River, del municipio de Bluefields en la Costa Caribe Sur. El objetivo principal es que mejoren sus prácticas para la protección medioambiental, la capacidad comunitaria y municipal para la gestión y mantenimiento de sistemas de agua y saneamiento. Otro objetivo es que la población se apropie del cambio de comportamiento con equidad, enfoque intergeneracional e intercultural.

Siguiendo las palabras de Oriola, «se están construyendo microsistemas de agua por gravedad, seis pozos comunitarios, la dotación a 400 familias de filtros domiciliares y cloro para la obtención de agua segura, así como campañas de limpieza y conservación de las fuentes de agua».

Este proyecto en particular está financiado por el Ajuntament de València, mientras que los otros proyectos de agua segura en Nicaragua están apoyados también por la Xunta de Galicia y la Generalitat Valenciana.

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