En las orientaciones propuestas hasta el momento por parte de la Convergencia Europea se hace hincapié en la metodología como herramienta esencial para llevar a cabo el cambio. El cambio desde las tradicionales clases magistrales, en las que el alumno era un mero ente pasivo, a clases más prácticas, talleres y seminarios, en los que los contenidos están centrados en el desarrollo de competencias y habilidades por parte del alumno. Esto es, la transformación de una enseñanza basada en la información del profesorado a una enseñanza basada en la actividad formativa del estudiante.
Dentro de este marco se desarrolla el Aula de Práctica Farmacéutica de la Universidad CEU-Cardenal Herrera. El Aula de Práctica Farmacéutica se implantó con el objetivo de que tanto alumnos como los profesores puedan servirse de los pacientes para adquirir conocimientos sobre la enfermedad y el tratamiento farmacológico, interaccionando entre ellos y adquiriendo habilidades para dar respuesta a sus necesidades.
El alumno de Farmacia, por tanto, tendrá contacto con el paciente desde que inicia el grado, aprenderá a detectar las necesidades de los pacientes a medida que va cursando sus estudios e irá aplicando los conocimientos adquiridos en la práctica real, lo que le permitirá desarrollar las habilidades necesarias para ser un buen profesional. De esta manera se incentiva la creatividad, el desarrollo de la intuición y el razonamiento para formar pensadores.
El Aula de Práctica Farmacéutica no sólo recibe a los pacientes, sino también a los profesionales farmacéuticos que acompañan a sus pacientes a la universidad para ayudarles a resolver sus problemas. Tanto los profesionales como los alumnos y los profesores aprendemos conjuntamente con los casos planteados. De esta forma, la universidad deja de ser un lugar elitista, cerrado y accesible sólo a unos pocos, para pasar a ser un lugar de aprendizaje a disposición de la población.