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Servicios farmacéuticos profesionales basados en la evidencia: el camino para el cambio

Servicios farmacéuticos profesionales basados en la evidencia: el camino para el cambio
Servicios farmacéuticos profesionales basados en la evidencia: el camino para el cambio

La última vez que escribí en El Farmacéutico Joven el mundo giraba en un sentido muy diferente de lo que lo hace ahora. Andamos en permanente cambio, eso en general es la vida en realidad, un permanente cambio, se abre paso por sí misma. Nada de este es nuevo, seguro que todos habéis sentido este tipo de sensaciones más de una vez en vuestras vidas.

Ahora estoy vinculado a una empresa consultora especializada en farmacoeconomía y evaluación de resultados en salud (Pharmacoeconomics & Outcomes Research Iberia). Se puede, se debe cambiar. Esto es lo primero que quería transmitir a través de este artículo, aunque ya no sea tan joven. Cambiar hacia nuevos horizontes, hacia nuevos retos es lo que nos hará siempre sentir realmente como si todo estuviera empezando, lo cual es otra manera de ser joven, independientemente de la edad que se tenga.
En mi última entrada hablé del concepto de farmacia comunitaria1. Un concepto relativamente nuevo, al menos para mí, ya que empecé a escucharlo hace unos 3 años. Desde entonces es cierto que algo se está moviendo en el contexto de la farmacia comunitaria.
Este nuevo paradigma en la forma de entender el papel de la farmacia y sus profesionales en la sociedad y como agente clave en los sistemas sanitarios debe gran parte de su expansión a la sociedad científica que lo representa, la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (SEFAC). Pero no hay que olvidar que ante todo se trata de una sociedad científica, y como tal tiene que volcar su actividad en poner en marcha proyectos de investigación. Esto es lo más importante desde mi punto de vista, ya que sobre el conocimiento pivota la capacidad de generar evidencia, tener argumentos sólidos para dirigir los resultados hacia los diferentes agentes sanitarios y mostrar la dirección del cambio. Vascular desde un modelo de farmacia basada en la dispensación a un modelo de farmacia basada en los servicios farmacéuticos profesionales no es viable ni realista sin una base científica. De igual manera, los resultados y los datos de proyectos científicos, no divulgados en los foros más exigentes (revistas científicas indexadas y con factor de impacto), son difícilmente defendibles.
El Consejo General de Colegios de Farmacéuticos, junto a la Universidad de Granada ha dirigido esfuerzos en este sentido. A través de diferentes proyectos no solo busca medir la efectividad de los servicios farmacéuticos profesionales, sino también lo que en términos de evaluación económica esto puede aportar a un tercer pagador a través de la realización de estudios de evaluación económica.
Un número importante de proyectos de diferente tipo se han lanzado más o menos recientemente con un mismo objetivo: poner en valor las actuaciones profesionales de la farmacia comunitaria en función de los resultados en salud. Repasaremos algunos de los proyectos más relevantes que algunos de estos agentes del cambio están llevando a cabo para conseguir facilitar el cambio.

Programas conSIGUE y ADHIÉRETE. Consejo General de Colegios de Farmacéuticos
Son programas liderados por el Consejo General de Colegios de Farmacéuticos. El programa conSIGUE2, en el que participa también el grupo de investigación de atención farmacéutica de la Universidad de Granada, busca evaluar el impacto del servicio farmacoterapéutico en la farmacia comunitaria. Participaron 178 farmacias comunitarias que reclutaron 1.403 pacientes polimedicados (más de 5 medicamentos) mayores de 65 años. Se han desarrollado varias fases, con resultados importantes vinculados a la provisión del servicio de seguimiento farmacoterapéutico: reducción de un 56% problemas de salud no controlados (0,44 problemas de salud no controlados por paciente), una disminución del 49% de visitas de urgencias y una reducción del 55% de pacientes que refirieron haber sido hospitalizados. Recientemente se han publicado nuevos datos de un análisis coste-utilidad3, estimándose el índice coste-efectividad incremental (ICER) de la revisión de la medicación y seguimiento frente a la dispensación habitual. Utilizando una perspectiva de sistema sanitario (Euros 2014), no sólo se observó una mayor reducción de la medicación en pacientes bajo revisión y seguimiento (0,28 ± 1,25 medicamentos; p < 0,001), sino que la calidad de vida de estos pacientes mejoraba 0,0528 ± 0,20 (p < 0,001). La estrategia basada en la revisión y seguimiento de la medicación en estos pacientes se mostró dominante frente a la dispensación habitual.
El Programa ADHIÉRETE4 está destinado a mejorar la adherencia a los tratamientos en pacientes mayores, crónicos, polimedicados e incumplidores, a través de intervenciones como los sistemas personalizados de dispensación (SPD) o aplicaciones móviles en salud. En fase de realización, se trata de un estudio postautorización de tipo observacional, sin grupo control, prospectivo y multicéntrico, que también incluirá el impacto del programa en términos de coste-beneficio. Aunque no he tenido acceso a los datos del artículo publicado, desde la página web se explica que análisis preliminares muestran una tendencia en la mejora de la adherencia, tanto por el test de Morisky-Green como por la toma de medicación. Además, la mejora de la adherencia parece estar relacionada con la mejora en la calidad de vida percibida por el paciente (aumento de 0,129 puntos entre la V1 y la VF).

CESAR, IMPACHTA, I-VALOR, ALERGOLÓGICA 2014, ASDIFAC. Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (SEFAC)
La SEFAC está haciendo también un importante trabajo para poner en valor el rol del farmacéutico comunitario en servicios profesionales como el de la deshabituación tabáquica, el control del paciente hipertenso y en riesgo cardiovascular, el control del paciente diabético, y la dispensación de medicamentos no sujetos a prescripción médica a través de la indicación farmacéutica. Estos son algunos de los proyectos recientes que lidera5:
• CESAR. Capacitación del farmacéutico para realizar de forma efectiva servicios de cesación tabáquica. Otras sociedades científicas como la SEPAR (Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica), SemFYC (Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria) y Semergen (Sociedad Española de Medicina de Atención Primaria) colaboraron en la elaboración de un documento de derivación estandarizado que facilite el trabajo coordinado con unidades médicas de referencia.
• IMPACHTA. Entre sus objetivos está mejorar la atención prestada al paciente en tratamiento con antihipertensivos para prevenir y reducir el riesgo vascular, así como mejorar las habilidades del farmacéutico comunitario en cribado de riesgo vascular. También participa la SEH-LELHA (Sociedad Española de Hipertensión-Liga Española para la lucha contra la hipertensión arterial).
• I-VALOR. Proyecto centrado en analizar el valor de una de las actuaciones más propias del farmacéutico comunitario, la indicación farmacéutica (dispensación de medicamentos no sujetos a prescripción médica para temas tan recurrentes como las erosiones cutáneas, síntomas menores de las vías respiratorias altas, pirosis, sequedad ocular y alergias). Se trata de comprobar el impacto que supone esta práctica profesional en el uso de los medicamentos y en el fortalecimiento de la relación paciente-farmacéutico. En este proyecto están participando casi la totalidad de colegios farmacéuticos profesionales en España.
• ASFIDAC y DIDAC. Proyecto en colaboración con la SED (Sociedad Española de Diabetes) tiene como objetivos analizar la percepción global que tienen de su enfermedad los pacientes diabéticos atendidos en las farmacias comunitarias y mejorar su conocimiento y cumplimiento terapéutico.

Todos estos proyectos, además, generan registros. Para capacitarte en CÉSAR es necesario reclutar al menos 2 pacientes y la aplicación de un protocolo de comunicación farmacéutico-paciente-médico. Igualmente, en el proyecto IMPACHTA es necesario realizar al menos 2 intervenciones de acuerdo con el protocolo de actuación establecido. En el proyecto I-VALOR cada participante tiene que registrar un mínimo de 50 intervenciones (al menos 5 de cada uno de los motivos de consulta). El formulario podrá rellenarse directamente de forma online en la web mientras se realiza la intervención o bien podrá descargarse para rellenar la intervención en papel y después informatizarlas.

Tener datos es un buen dato
Evaluar las intervenciones sanitarias y el papel del farmacéutico como agente sanitario es fundamental para poder generar evidencia que soporte su inserción en los sistemas sanitarios. Todos los proyectos mencionados son un gran mensaje que debería animar a muchos de vosotros de cara a los próximos años. Estos serán la base del conocimiento que habrá que gestionar próximamente. El hecho de que instituciones y organizaciones como el Consejo General de Colegios de Farmacéuticos, la SEFAC o la Universidad se embarquen en proyectos para sentar los cimientos de otro modelo de farmacia basado en el conocimiento muestra que hay una determinación clara en investigar el rol del farmacéutico como agente sanitario.
La realización de proyectos de investigación con un diseño adecuado, con datos de calidad suficientes para poder generar evidencia y publicarla en revista indexadas y de factor de impacto es una buena vía para empezar a construir argumentos sólidos y defendibles. De igual manera que ocurre con las tecnologías sanitarias (medicamentos, dispositivos médicos, etc.), se hace indispensable que los programas sanitarios o los servicios farmacéuticos profesionales, una vez superadas las barreras de seguridad, eficacia y calidad, afronten estudios de evaluación económica rigurosos para poder saltar esa «cuarta barrera» y abrir así las puertas a posibles vías de financiación por parte de terceros pagadores.

Conclusiones
Como comentaba al comienzo cambiar es bueno, sobre todo si es en la dirección adecuada. El difícil escenario actual, lleno de arenas movedizas, hace que salgan a la luz iniciativas que dan lugar a otros escenarios más sólidos y vibrantes, y quien sabe si más acordes a lo que la sociedad espera del rol del farmacéutico comunitario.

Bibliografía

1. Mayo E. El Farmacéutico: formación e información farmacéutica [Internet]. Concepto de Farmacia Comunitaria.Revista El Farmacéutico. [citado 23 de marzo de 2015]. Recuperado a partir de: http://www.elfarmaceutico.es/el-farmaceutico-joven/manual-del-superviviente/concepto-de-farmacia-comunitaria

2. Martínez Martínez F, Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (España). Consigue: informe : medida del impacto clínico, económico y humanístico del servicio de seguimiento farmacoterapéutico en mayores polimedicados, en la farmacia comunitaria española. Madrid: Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos; 2014.

3. Jódar-Sánchez F, Malet-Larrea A, Martín JJ, García-Mochón L, López Del Amo MP, Martínez-Martínez F, et al. Cost-Utility Analysis of a Medication Review with Follow-Up Service for Older Adults with Polypharmacy in Community Pharmacies in Spain: The conSIGUE Program. Pharmacoeconomics. 15 de marzo de 2015;
4. Programa ADHIERETE [Internet]. [citado 23 de marzo de 2015]. Recuperado a partir de: http://www.portalfarma.com/Profesionales/DestacadosProfesionales/Paginas/Programa-ADHIERETE.aspx
5. Proyectos de investigación [Internet]. [citado 23 de marzo de 2015]. Recuperado a partir de: http://www.sefac.org/proyectos-de-investigacion

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