Botiquín de verano: el elemento imprescindible para las vacaciones

Botiquín de verano: el elemento imprescindible para las vacaciones

¿Qué deberíamos llevar en nuestra maleta para cuidar nuestra salud a la hora de ir de vacaciones? Los pacientes preparan su maleta para aprovechar unos días de vacaciones, pero a veces se les olvida lo más importante: el botiquín. Desde la farmacia podemos acompañar al paciente ofreciendo determinados productos, medicamentos sin prescripción médica y algunos consejos.

 

Lo primero que se nos viene a la mente al pensar en un botiquín es la cruz roja, las tiritas, las tijeras y las gasas. Pero, ¿qué pasaría si imaginásemos el botiquín como una pequeña maleta y pensáramos en lo que nos podría ocurrir, desde heridas, ampollas o quemaduras hasta insolaciones, fiebre o problemas gastrointestinales?

Piel, fotoprotección y aftersun

Los niveles de radiación solar y el tiempo de exposición al sol aumentan en las estaciones de primavera y verano. Algunos pacientes creen que la protección solar solo es necesaria cuando van a estar en la piscina o en la playa. Pero esto no es así; habría que concienciar de que la exposición solar se acumula día a día1.

¿Cómo podemos ayudar a elegir el protector solar más adecuado?2,3. Aquí van algunos consejos:

  • Escoger un protector de «amplio espectro». Son aquellos que protegen de los rayos UV de tipo A (UVA) y de los de tipo B (UVB). Los rayos UVB son la principal causa de quemaduras y cánceres, aunque los UVA también tienen cierto efecto sobre el cáncer y el envejecimiento prematuro.
  • Resistente al agua no significa que no se pueda eliminar. Al sudar o secarnos con la toalla, por ejemplo, estaríamos eliminando el protector, por lo que lo más adecuado es aplicárselo de nuevo cada dos horas o menos, dependiendo de si hemos estado nadando o sudando.
  • Al elegir un protector solar hay que tener en cuenta el factor de protección solar (FPS), que es el índice que mide la capacidad protectora de un protector solar frente a los rayos UVB sobre la piel para que pueda estar expuesta al sol sin que aparezca enrojecimiento.

Para elegir el FPS adecuado será necesario ver el tipo de piel y los niveles de radiación UV (tabla 1). El FPS indica el tiempo que dura la protección frente al sol. Para calcular esta duración se puede usar la siguiente fórmula3:

Tiempo que la piel puede estar al sol sin quemarse  X   FPS  = tiempo en que se está protegido frente al sol

 

Por ejemplo, una persona con piel clara que normalmente empezaría a quemarse después de 10 minutos al sol, tardaría 15 veces más con un factor de protección solar 15 (150 minutos o 2,5 horas).

 

El aftersun (postsolar) es una loción indicada para tratar la piel después de haberla expuesto al sol. Hidrata, repara los efectos de la radiación sobre la epidermis y alivia la piel. La radiación solar produce deshidratación, inflamación e irritación de la epidermis, provocando pérdida de elasticidad, iluminación e incluso otras lesiones más graves como quemaduras, manchas, sensibilidad, envejecimiento cutáneo prematuro y melanomas. Por tanto, después de la exposición al sol es muy recomendable aplicar un aftersun ya que contiene principios activos antiinflamatorios y regeneradores de la piel4.

Quemaduras solares e insolación

Las quemaduras solares se producen cuando el cuerpo queda expuesto sin protección, cuando la luz ultravioleta llega a la piel porque esta no está protegida o porque la ropa está abierta. Las quemaduras pueden tardar días en curarse, y algunos de los síntomas son el cambio del tono de la piel, el enrojecimiento y pequeñas ampollas. Hay casos en los que la persona afectada incluso debe ser derivada al médico, como cuando no hay mejoría en pocos días o cuando se producen una gran hinchazón, ampollas y quemaduras extensas o infección.

En caso de quemadura leve, desde la farmacia podemos ofrecer algunos productos y consejos5:

  • Un analgésico de venta libre.
  • Aconsejar refrescar la piel aplicando una toalla limpia humedecida con agua, o realizar un baño con bicarbonato de sodio (60 g) y agua fresca.
  • Ofrecer una loción de aloe vera o crema hidratante.
  • Advertir de que no debemos romper las ampollas intactas, y, en caso de que se rompan, aplicar agua y jabón y, posteriormente, un ungüento con antibiótico y cubrir la herida.
  • Tratar con crema hidratante la piel que se vaya descamando.
  • Ofrecer un antihistamínico oral en caso de picazón.
  • Aconsejar una crema con un corticosteroide de venta libre si las quemaduras son leves-moderadas.
  • Advertir de que se debe proteger la quemadura de una posterior exposición al sol.

¿Cómo actuar frente a una insolación
o un golpe de calor?6-9

Las elevadas temperaturas durante el verano y el tiempo que estamos al aire libre pueden producir una insolación o golpe de calor. Estas circunstancias pueden hacer que los mecanismos que regulan la temperatura del cuerpo empiecen a fallar, y que la temperatura corporal suba a 40oC en 10-15 minutos, produciendo una importante pérdida de agua y deshidratación. Las personas mayores y los niños son la población con mayor riesgo de insolación. Los síntomas de insolación que se suelen padecer son sudoración excesiva, fatiga, subida de la temperatura corporal y mareos. Sin embargo, los síntomas de un golpe de calor son, durante la primera etapa, náuseas y vómitos, dolor de cabeza, mareos y una temperatura corporal elevada; en la siguiente etapa llegan a producir confusión, agitación, dificultad para hablar, irritabilidad, convulsiones, delirio, alteración en la sudoración, piel enrojecida, ritmo cardiaco acelerado, respiración rápida, e incluso se puede llegar al coma6-8.

En caso de insolación o golpe de calor, se debe derivar al paciente a urgencias, ya que constituye una situación de riesgo que puede llegar a ser muy grave. Si no es posible llevar al paciente a Urgencias, estos son los pasos a seguir mientras llega la ambulancia:

  • Colocar al paciente en un lugar fresco.
  • Quitarle la ropa que sea innecesaria y colocarlo sobre un costado para exponer al aire tanta superficie de la piel como sea posible.
  • Enfriar el cuerpo del paciente con agua fría, empleando una esponja, una toalla o compresas de agua fría sobre el cuello, nuca, frente y demás partes del cuerpo, y abanicarlo hasta que llegue la ambulancia.
  • En caso de que el paciente esté despierto y pueda tragar, debería beber agua fresca en pequeños sorbos siempre que se pueda, de 1 a 2 litros en un plazo de 1 a 2 horas para hidratarlo bien. Para ello, debemos colocarlo en posición semisentada.
  • Tomar la temperatura por vía rectal para bajarla a 39 oC lo antes posible. En esta situación de emergencia, no es adecuado tomar la temperatura por la boca o el oído.
  • No suministrar aspirinas ni acetaminofeno para disminuir la temperatura, ya que estos fármacos podrían afectar a la respuesta del cuerpo.

Medidas a seguir para prevenir el golpe de calor
o la insolación8

  • Hidratación: mantener el cuerpo hidratado, bebiendo entre 2 y 2,5 litros de agua al día. En el caso de los niños y las personas mayores, lo mejor es llevar consigo una botella de agua e ir bebiendo poco a poco. También es adecuado tomar frutas y verduras, y evitar la cafeína y el alcohol por su efecto diurético.
  • Horas en el exterior: evitar las horas de mayor calor, en especial de 12:00 a 16:00 horas.
  • Caminar por la sombra siempre que se pueda.
  • Emplear ropa transpirable, preferiblemente de color claro y de algodón.
  • Usar sombrero y gafas de sol. Los sombreros y gorras no deben quedar muy ajustados, de modo que favorezcan la circulación.
  • No permanecer estacionados en vehículos sin aire acondicionado o con las ventanillas cerradas.
  • En casa, permanecer lo más fresco posible con aire acondicionado o ventilador, y mantener las habitaciones en sombra.

Material de cura y productos sanitarios10-13

El material de cura indispensable en nuestro botiquín sería el siguiente: termómetro, pinzas, repelente de insectos, gasas, esparadrapo, algodón, apósitos, suero fisiológico, tijeras, tiritas y antisépticos para curar heridas, cortes y rozaduras. También podría incluirse algún producto sanitario para evitar que salgan ampollas en los pies, y pomada para quemaduras.

En caso de hacerse una herida, habría que lavarla con agua y jabón, y posteriormente usar un antiséptico. No deben utilizarse dos antisépticos diferentes en el mismo sitio ya que pueden interaccionar entre ellos y producir daños.

Los antisépticos presentan cuatro cualidades importantes:

  • Un amplio espectro de acción (bactericida o bacteriostático, virucida, esporicida, etc.).
  • Actúan contra los gérmenes de forma rápida.
  • Tienen la duración de acción requerida.
  • Ofrecen inocuidad sistémica y local.

El material de cura indispensable en nuestro botiquín sería
el siguiente: termómetro, pinzas, repelente de insectos, gasas, esparadrapo, algodón, apósitos, suero fisiológico, tijeras, tiritas y antisépticos para curar heridas, cortes y rozaduras

 

En el mercado, los antisépticos más utilizados son los siguientes:

  • Povidona yodada: antiséptico que tiene la acción microbicida del yodo y además constituye un antifúngico de amplio espectro. Su uso está indicado para la desinfección de heridas, quemaduras y úlceras. La acción microbicida la realiza en el pus, suero, sangre y tejido necrosado. El efecto de antisepsia perdura en la zona desinfectada.
  • Clorhexidina: acción sobre bacterias grampositivas y gramnegativas, con un efecto bajo en virus y hongos. Puede perder algo de eficacia en presencia de jabón; por ello se suele emplear en heridas abiertas o en la piel intacta. Se usa como alternativa a la povidona yodada en los casos en que no puedan aplicarse los derivados del yodo (como en mujeres embarazadas y niños).
  • Agua oxigenada o peróxido de hidrógeno: aunque son útiles para aplicar sobre heridas, su efecto no resulta muy satisfactorio ya que su acción es corta. Presentan una actividad antibacteriana débil y también virucida. Producen escozor o quemazón cuando se aplican sobre heridas abiertas.

En caso de cortes o rasguños, desde la farmacia podemos curarlos si es factible controlarlos, por ejemplo, si son pequeños. Estos serían los pasos a seguir14:

  1. Lavarse las manos.
  2. Detener el sangrado. Cuando los cortes o rasguños son pequeños, el sangrado se detiene solo; si no fuera así, hay que hacer una presión suave con una venda o paño limpio hasta que deje de sangrar.
  3. Limpiar la herida. Lavarla con agua, colocarla debajo del grifo, y lavar con jabón la zona que rodea la herida evitando que el jabón entre en ella. Eliminar cualquier suciedad o restos con pinzas limpias (las pinzas deben limpiarse previamente con alcohol). En caso de no poder eliminar esos restos, derivar al médico.
  4. Aplicar antibiótico o vaselina para mantener húmeda la superficie y evitar la formación de cicatrices. Algunas personas pueden presentar sensibilidad a determinados ungüentos (si aparecen erupciones, suspender el uso del ungüento).
  5. Tapar la herida. Colocar un vendaje, una gasa enrollada o cinta de papel a su alrededor, o un apósito, siempre cubriendo la herida para mantenerla limpia. Si se trata de un rasguño, esto no es necesario.
  6. Cambiar el apósito al menos una vez al día, o cuando se moje o se ensucie.
  7.  Recomendar al paciente vacunarse contra el tétanos (si no lo ha hecho en los últimos cinco años) en caso de que la herida sea profunda o esté sucia.
  8.  Buscar signos de infección. Derivar al médico si el paciente presenta signos de infección, como enrojecimiento, mucho dolor, drenaje, calor o hinchazón.

 

Medicamentos de venta libre

Los medicamentos de venta libre necesarios en el botiquín de verano son los siguientes11:

  • Analgésicos para el dolor ocasional y antipiréticos para la fiebre.
  • Antiácidos, antidiarreicos, laxantes y productos de rehidratación oral. Cuando se realizan algunos cambios en los hábitos alimentarios pueden producirse síntomas gastrointestinales, como acidez, diarrea o estreñimiento.
  • Antihistamínicos, en caso de tener alergias.
  • Antieméticos, para prevenir los mareos.

Conclusiones

A la hora de hacer la maleta para las escapadas de primavera y las vacaciones de verano, hay que recordar que es necesario cuidar la salud. El recipiente (maleta pequeña, neceser…) donde se llevan todos los medicamentos y productos sanitarios debe ser resistente y ligero para su correcta conservación. En el caso de los medicamentos, es mejor llevarlos en su embalaje original y colocarlos debajo de todo lo que más pese: cremas, aftersun, etc.

Desde la farmacia podemos ayudar al paciente a completar su botiquín de verano recordándole, en caso de enfermedad crónica, su medicación habitual con la receta y las pautas. A modo general, los imprescindibles de un botiquín serían: protector solar, aftersun, termómetro, compresas, tampones, analgésicos y antipiréticos de venta libre, repelente de insectos, antieméticos, pomada para quemaduras y material de cura (pinzas, gasas, esparadrapo, algodón, apósitos, suero fisiológico, tijeras, tiritas y antisépticos para curar heridas, cortes y rozaduras). 

Bibliografía

  1. Sociedad Americana Contra El Cáncer. ¿Cómo me protejo de los rayos UV? Julio de 2019. Disponible en: https://www.cancer.org/es/saludable/protejase-del-sol/proteccion-contra-rayos-ultravioleta.html
  2. Sociedad Americana Contra El Cáncer. Escoja el protector solar adecuado. Junio de 2018. Disponible en: https://www.cancer.org/es/noticias-recientes/escoja-el-protector-solar-adecuado.html
  3. Instituto de Dermatología Avanzada. El significado del factor de protección solar. Disponible en: https://www.iderma.es/es/blog.cfm/ID/13114/ESP/el-significado-factor-proteccion-solar.htm
  4. GGcare Cosmetics. Neurocosmética natural. Aftersun. Julio de 2021. Disponible en: https://www.ggcarecosmetics.com/es/blog-cosmetica/dermocosmetica-efectiva/363-aftersun-3
  5. Mayo Clinic. Quemaduras solares. Julio de 2021. Disponible en: https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/sunburn/diagnosis-treatment/drc-20355928
  6. Sanitas. Cómo actuar en caso de insolación o golpe de calor. Disponible en: https://www.sanitas.es/sanitas/seguros/es/particulares/biblioteca-de-salud/prevencion-salud/salud-en-verano/insolacion.html
  7. Mayo Clinic. Golpe de calor. Julio de 2021. Disponible en: https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/heat-stroke/symptoms-causes/syc-20353581
  8. Sanitas. Cómo evitar una insolación o golpe de calor. Disponible en: https://www.sanitas.es/sanitas/seguros/es/particulares/biblioteca-de-salud/prevencion-salud/salud-en-verano/evitar-insolacion.html
  9. Cigna International. Healthwise. Primeros auxilios de emergencia para la insolación. Febrero de 2020. Disponible en: https://www.cigna.com/es-us/individuals-families/health-wellness/hw/temas-de-salud/primeros-auxilios-de-emergencia-para-la-insolacin-tw3250spec
  10. García E. Blog del Real e Ilustre Colegio de Farmacéuticos de Sevilla. Cómo organizar un botiquín casero. Junio de 2016. Disponible en: http://www.farmaceuticosdesevilla.es/blog/como-organizar-un-botiquin-casero_aa744.html
  11. Asociación para el Autocuidado de la Salud (ANEFP). Conoce los imprescindibles en el botiquín de verano. Julio de 2021. Disponible en: https://anefp.org/es/blog/conoce-los-imprescindibles-en-el-botiquin-de-verano
  12. Apoya tu salud. ¿Qué antiséptico utilizar para curar una herida? Abril de 2018. Disponible en: https://www.apoyatusalud.com/que-antiseptico-utilizo/
  13. Bilbao N. Elsevier. Farmacia Profesional. Antisépticos y desinfectantes. Julio de 2009. Disponible en: https://www.elsevier.es/es-revista-farmacia-profesional-3-articulo-antisepticos-desinfectantes-13139886
  14. Mayo Clinic. Cortes y raspaduras: primeros auxilios. Enero de 2022. Disponible en: https://www.mayoclinic.org/es-es/first-aid/first-aid-cuts/basics/art-20056711