Un auca o aleluya es un pliego de papel impreso por una cara que contiene un conjunto de viñetas en cuyo pie suelen aparecer unos versos que aluden a la escena representada. Tradicionalmente, un auca incluye cuarenta y ocho viñetas dispuestas en ocho hileras y seis columnas, impresas a una sola tinta y por el sistema xilográfico; sin embargo, desde hace algunos años se editan en distintas técnicas, medidas y otros formatos.
Hay cierta unanimidad en que el origen de las aucas es catalán, habiendo sido Barcelona el mayor centro productor, seguida de Valencia y, posteriormente, Madrid. Las primeras aucas editadas en Madrid datan de 1842, y fue en Madrid donde se comenzaron a llamar aleluyas a las aucas, al parecer, porque el Sábado Santo era costumbre lanzar, desde los balcones, unas hojas con la palabra aleluya impresa a los niños.
Mucho podría hablarse de la diversidad temática de las aucas y de su evolución, pero conviene ceñirse a las de interés farmacéutico.
En una colección farmacéutica de aleluyas se distinguen básicamente dos tipos, las editadas por personas ajenas al mundo farmacéutico y las generadas dentro del entorno propiamente profesional.
Dentro del primer grupo, hay que referirse, en primer lugar, a las aucas denominadas «de las artes y oficios», muy abundantes a finales del siglo XVII y buena parte del XIX. En bastantes de ellas, aunque no en todas, aparece una viñeta dedicada a la farmacia o al farmacéutico. La característica común de estas es la figura del boticario de pie detrás del mostrador, elaborando algún medicamento con el mortero, acompañado de una balanza y una retorta; tras él, al fondo, unas estanterías repletas de frascos, botes, cajas y recipientes. Uno de los textos más repetidos en el pie de la viñeta es el verso pareado «Una farmacia y un pozo / son de un hombre un alborozo». Muchas de estas ilustraciones han sido reproducidas en azulejos desde el siglo XVIII hasta la actualidad.
También caben en la colección aquellas aleluyas en las que el boticario es un personaje más de una escena integrada en una narrativa, como, por ejemplo, una de las viñetas de L'Auca del Tarlà de l'Argenteria (Girona).
Dentro del segundo grupo, pueden clasificarse según el editor, que puede ser un boticario, una empresa de distribución, un laboratorio farmacéutico, una corporación profesional farmacéutica o, simplemente, un colectivo profesional en un acto conmemorativo.
Con tintes publicitarios puede citarse la aleluya, posiblemente, de 1910, titulada Auca dels Remeis («Auca de los remedios»), en la que al pie de una de sus viñetas se lee: «Si de tos te queixas / pren Pastillas Freixas» («Si de tos te quejas / toma Pastillas Freixas»). La farmacia Freixas estaba situada en el número 99 del Paseo de Gracia de Barcelona.
Otro ejemplo de este grupo podría ser la moderna y vistosa aleluya conmemorativa de los 25 años de la Promoción 1964 de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Barcelona, con texto de Albert Arquet y dibujos de Ignasi Sarriàs, ambos farmacéuticos de la citada promoción. En ella destaca el edificio de la Facultad (Núcleo Universitario de Pedralbes) con una serpiente enroscada en el mismo y diecinueve viñetas con sus respectivos versos, dedicados mayoritariamente a los profesores de la promoción.
Es muy remarcable que el Colegio de Farmacéuticos de Barcelona, en 1996, organizara una exposición de aleluyas, a través de su Comisión de jubilados. Todo el material expuesto fue publicado por el propio Colegio. En total diecinueve aleluyas, todas ellas realizadas por farmacéuticos colegiados jubilados y de temática profesional, con el añadido de una inspirada décima de introducción del farmacéutico Francesc Blancher Puig.