Opinión

Congresos farmacéuticos: place to be

Guillermo Estrada Riolobos

Farmacéutico comunitario. Lorca (Murcia)

Personalmente, definiría un Congreso de Farmacia como: Evento de carácter académico o profesional organizado por empresas o instituciones con objetivos como actualizar el conocimiento asistencial o comercial, así como participar del encuentro y enriquecimiento con otros profesionales del sector. Y, por fortuna, en España tenemos congresos de Farmacia para todos los gustos y colores, repartidos a lo largo de toda la geografía y durante todo el año.  

Disfrutamos de congresos mayoritariamente asistenciales, promovidos por sociedades científicas (SEFAC o Pharmaceutical Care) y enfocados en la actividad del farmacéutico; de congresos europeos, en los que participan colegios profesionales (INFARMA) y que se enfocan en la actividad de la farmacia; de congresos nacionales (Congreso Nacional Farmacéutico), organizados por entidades supracolegiales que intentan recoger toda la dicotomía de la farmacia; y de congresos organizados por universidades (SIMPODADER o INTERFARMA), que pretenden enriquecer a su alumnado con la experiencia y la profesionalidad de farmacéuticos activos profesionalmente.

Si tienes la oportunidad, selecciona y programa al menos uno al año. ¡No te arrepentirás y no querrás que sea el último!

Y si ampliamos un poco el ángulo de visión, podremos descubrir que los farmacéuticos somos bien recibidos en congresos interdisciplinares, como pueden ser los monográficos de Tabaquismo (SEDET), Dolor (SED) o Salud Pública (SESPAS), muy enriquecedores ya que participamos activamente junto a otros profesionales sanitarios.

Hay una frase o hashtag muy utilizada por influencers cuando disfrutan esquiando, de fiesta o en la playa, «place to be», que se podría traducir como «el sitio para estar»; pues algo parecido pasa con los congresos: son el momento y lugar en el que podemos optimizar nuestro aprendizaje en el conocimiento de nuestro ámbito profesional. Deberíamos tener una máquina de clones para asistir a todos, pero, si tienes la oportunidad, selecciona y programa al menos uno al año. ¡No te arrepentirás y no querrás que sea el último!