El Grupo Farmasierra acaba de lanzar Zenflore®, el primer psicobiótico para mejorar la estabilidad emocional validado por estudios clínicos. Esta solución psicobiótica, microorganismos vivos que en las dosis adecuadas modulan la microbiota y mejoran la salud mental, combina, por un lado, la cepa única Bifidobacterium longum 1714TM y, por otro, una selección específica de vitaminas del grupo B que contribuyen al normal funcionamiento del sistema nervioso, al rendimiento intelectual o a disminuir el cansancio y la fatiga.
El estrés es una respuesta fisiológica, física o mental a cualquier demanda energética a la que es sometido el organismo, y cuyo objetivo es resolver una situación compleja. Está presente en nuestra vida diaria, pero puede llegar a ser un factor de riesgo para la salud y el comportamiento psicosocial, especialmente cuando aparece de forma sostenida en el tiempo.
Los problemas de salud relacionados con el estrés suponen el 25% de las hospitalizaciones y el 35% de las consultas en Atención Primaria en el mundo. Como ha explicado el Dr. Tomás Olleros, presidente del grupo Farmasierra, “Zenflore® ha demostrado a través de estudios clínicos su capacidad para mejorar la estabilidad emocional de las personas sometidas a estrés. Estamos muy orgullosos de poder ofrecer esta alternativa que no genera ningún tipo de dependencia, efectos adversos ni interacciona con otra medicación”.
Evidencia clínica del Bifidobacterium longum 1714TM
La cepa Bifidobacterium longum 1714TM es el primer probiótico clínicamente estudiado como cepa individual para el bienestar mental, demostrando su eficacia en la atenuación de las respuestas psicológicas y fisiológicas al estrés agudo y al estrés social.
Estudios de Real World Evidence (RWE) con Zenflore® han demostrado mejoría en el bienestar mental y el estrés, en el tiempo para dormirse y la duración del sueño y una reducción del cansancio, la fatiga, la sensación de estar superado y la dificultad para mantener la atención.
El estudio clínico controlado con grupo placebo de Bifidobacterium longum 1714TM en estrés agudo demostró que la administración de 109 UFC diarias de la cepa durante 4 semanas redujo significativamente el cortisol en saliva y disminuyó el estado de ansiedad y el estrés percibido en respuesta al estrés agudo, en comparación con placebo, y mejoró el rendimiento cognitivo.
Por su parte, el ensayo de Bifidobacterium longum 1714TM en estrés social demostró que la cepa moduló la actividad, manteniendo la estabilidad emocional durante situaciones de estrés social, en comparación con placebo en un ensayo doble ciego randomizado durante un juego virtual programado de inclusión y exclusión social, y mediante cuestionario de estado de ánimo.
Web para pacientes y profesionales
Además del lanzamiento, el grupo Farmasierra ha publicado un portal web para pacientes y profesionales sobre el psicobiótico, así como con información útil acerca del estrés, cómo influye en nuestro organismo, sus causas y consecuencias y cómo aprender a manejarlo.
“El ritmo de vida, el aislamiento propio de los nuevos modelos de trabajo y muchas otras situaciones influyen en el estrés diario que todos experimentamos. Con Zenflore queremos ofrecer nuestra ayuda para mejorar la estabilidad emocional de personas a partir de 12 años que puedan necesitarlo”, ha concluido el Dr. Olleros.
Eje intestino-cerebro
En los últimos años numerosos estudios han puesto de manifiesto la relación entre la modulación de las bacterias intestinales, la microbiota, y la conexión bioquímica existente entre el cerebro y el sistema gastrointestinal. Es el llamado eje intestino-cerebro, que conecta los centros emocionales del cerebro con las funciones intestinales y sus mecanismos, como el reflejo entérico, la permeabilidad intestinal, la activación inmune y la señalización endocrina. Así, la microbiota es un regulador clave de este eje, que ejerce sus funciones mediante el sistema endocrino, con la producción de cortisol; el sistema inmune, con la estimulación de células inmunes; el sistema nervioso, produciendo neurotransmisores y el sistema límbico generando respuestas emocionales o de comportamiento.
En esta relación bidireccional intestino-cerebro, la microbiota es capaz de modular la respuesta al estrés de estos sistemas a la vez que el estrés puede influenciar el perfil de la microbiota intestinal. De ahí que, en las dosis adecuadas, los psicobióticos hayan demostrado su eficacia en la mejora en la estabilidad emocional y en la gestión del estrés.