Situación crítica
Esta medida extraordinaria se había tomado ante «la situación tan crítica que sufren las oficinas de farmacia», motivada por la actual crisis económica, por los continuos decretos que obligan a las farmacias a realizar aportaciones económicas desde el año 2000 (RD 5/2000) y las nuevas medidas aprobadas este año (RDL 4 y 8/2010), ya que, según se dijo, «de lo contrario las farmacias no podrían hacer frente a los pagos pendientes con los distribuidores y los generados por la actividad normal de un establecimiento sanitario». Se denunció, asimismo, que las oficinas de farmacia se ven afectadas periódicamente por todo tipo de medidas de racionalización del gasto, como los precios de referencia, el recorte de los precios de los medicamentos genéricos realizado en el anterior decreto o los descuentos en productos sanitarios, además de afrontar la continua exigencia de modernización de sus instalaciones.
Además, en la Asamblea, en la que estuvieron presentes todas las instituciones vinculadas a la oficina de farmacia (distribución, asociaciones empresariales...), se informó que el Colegio de Farmacéuticos de Valencia exigirá a la Conselleria de Sanitat el pago de los gastos generados por los intereses de la póliza, que asciende a la cantidad de 80 millones de euros.