Su composición única refuerza la barrera cutánea ayudando en la protección de la piel. Gracias a su isotonicidad actúa en perfecto equilibrio con la piel y no altera su actividad, ya que es similar a la del factor de hidratación natural de la piel (NMF). Además, el Agua Termal de Uriage calma las picaduras y las irritaciones, ayuda a la piel en su proceso de cicatrización, alivia los sarpullidos infantiles y evita el envejecimiento prematuro de la piel, entre otros beneficios demostrados.
El agua termal de Uriage fue protagonista en el stand de Uriage en Infarma 2016, donde Uriage estuvo presente para acercar a los farmacéuticos las propiedades de esta fuente única de salud y belleza, así como sus últimos avances en dermocosmética.
El agua termal de Uriage es la base de todos los cuidados que presentó la firma, ya que el agua termal de Uriage está indicada también en afecciones dermatológicas como eccemas, dermatosis pruriginosas y otras dermatosis como quemaduras o acné, así como para pacientes con psoriasis en todas sus formas, donde la aplicación del agua termal de Uriage tiene un resultado significativo pues el 65% de los pacientes atenúa sus lesiones.
Novedades
La compañía presentó en Infarma 2016 sus últimas novedades, como la línea lanzada para el cuidado de la piel del bebé, la renovada línea de fotoprotección Bariésun, con la incorporación de filtros de última generación y las propiedades exclusivas del agua termal de Uriage, así como la gama de cuidados para el acné. Entre las últimas novedades destacó también la renovación de la gama para pieles atópicas con una nueva combinación de principios activos basados en el cerasterol 2F, que repara y fortalece la barrera cutánea, el complejo TLR2-regul, que modula la barrera de defensa innata, y el agua termal de Uriage, que reequilibra la barrera microbiana.
Estos cuidados se suman a las más de 100 referencias que tiene el laboratorio en nuestro país. Todas las fórmulas son hipoalergénicas, no comedogénicas, sin parabenos y contienen un mínimo de conservantes con el fin de respetar al máximo la piel, sobre todo aquellas más delicadas e intolerantes.