Ensayos clínicos
A través de un robusto programa de desarrollo clínico, AWARD, con más de 5.000 pacientes, dulaglutida ha demostrado una reducción de HbA1c significativa y sostenida en seis estudios con comparador activo. «Dulaglutida ofrece unos datos consistentes en su perfil clínico de eficacia y seguridad que lo avalan como un tratamiento inyectable para la diabetes que ofrece una mejoría importante del control glucémico, comparable al inyectable diario más potente. Además, su administración semanal reduce las inyecciones en un 85%, con un dispositivo realmente fácil de usar», indica el Dr. Esteban Jódar, jefe de Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Quirón de Madrid e investigador en varios de los estudios AWARD.
Trulicity® 1,5 mg (dulaglutida) puede administrarse desde el principio en combinación con otros tratamientos utilizados para la reducción de la glucosa, incluida la insulina, cuando estos fármacos no proporcionan un adecuado control.
«Dulaglutida ofrece bastante flexibilidad para los pacientes. Se administra una vez a la semana y puede utilizarse en cualquier momento del día, con independencia de las comidas», afirma Maria Luisa Amaya, enfermera especialista en educación terapéutica y diabetológica.
Fácil administración más adherencia al tratamiento
«Dulaglutida, con un dispositivo que ofrece una sencillez en su administración no conocida hasta hoy en la diabetes, podría suponer una importante alternativa para el tratamiento de la diabetes tipo 2 y, en especial, para los pacientes en los que se esté planteando su primera terapia inyectable», explica el Dr. Luis Alberto Vázquez, endocrinólogo y responsable del desarrollo clínico de dulaglutida en Lilly España.
La pluma desechable de dulaglutida es la única disponible en la actualidad, en diabetes, que ya está completamente preparada para ser administrada. Puesto que la aguja ya está preinsertada y la dosis se libera de manera automática, «los pacientes sólo tienen que presionar un botón para inyectarse el tratamiento de forma subcutánea en las zonas habituales, como el abdomen, muslo o en la parte superior del brazo, sin precisar pellizcarse la piel manualmente», señala María Luisa Amaya.
Evidencias científicas
A través de los ensayos clínicos AWARD 1-6, dulaglutida se ha estudiado en combinación con los fármacos usados con más frecuencia en diabetes, y en comparación con tratamientos habituales. En palabras del Dr. Jódar: «El robusto programa de desarrollo clínico fue ideado para testar su eficacia sobre el control glucémico en el mundo real. Dulaglutida ha demostrando superioridad frente a las demás terapias y no inferioridad frente a la dosis máxima diaria de liraglutida, ante la cual aporta un beneficio para el paciente gracias a su administración semanal».
Las evidencias clínicas han puesto de manifiesto que con una dosis de 1,5 mg a la semana, dulaglutida consiguió que un elevado porcentaje de pacientes alcanzase una HbA1c <7%, ayudándoles así a lograr su objetivo glucémico. Del mismo modo, mostró una mayor reducción en los valores medios de glucemia postprandial frente a exenatida diaria.
Además de estos datos, también se observaron beneficios adicionales de dulaglutida relacionados con una reducción del peso corporal, con un descenso adicional de hasta 2,88 kg, que se mantuvo hasta dos años después, independientemente de la terapia concomitante.
Dulaglutida presentó un perfil de seguridad y tolerabilidad gastrointestinal comparable al resto de los agonistas del receptor de GLP-1, con una incidencia de hipoglucemias similar a liraglutida 1,8 mg diario y una menor incidencia que insulina glargina.