El mercado cosmético de España es uno de los más importantes de Europa, no solo por volumen sino por la magnífica imagen de los productos españoles, según se ha destacado en Cosméticaforum, el congreso del sector de la perfumería y cosmética que ha celebrado su sexta edición en el pabellón 14 de IFEMA de Madrid dentro de Farmaforum, la feria de la Industria Farmacéutica, Biofarmacéutica, Cosmética y de Tecnología de Laboratorio en España.
El mercado cosmético mueve 9.250 millones de euros al año en España y ha experimentado un crecimiento del 11,3% en 2022, lo que le sitúa como la cuarta fuerza de Europa y la segunda del mundo en perfumería, según la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética (Stanpa). “El objetivo de este foro es compartir con los participantes, a través de las ponencias de los expertos más destacados de cada una de las áreas, los aspectos más candentes tanto desde el punto de vista regulatorio como de mercado del sector de la cosmética”, ha asegurado Carmen Esteban, directora de Cosméticaforum.
Durante las diversas charlas y conferencias que han tenido lugar en el evento se ha debatido sobre los retos a los que se enfrenta la industria cosmética en la actualidad. Por un lado, en el ámbito legislativo el sector se está adaptando a la sostenibilidad y las medidas relacionadas con la Agenda 2030. “Europa es puntera en el desarrollo de leyes y políticas medioambientales, por lo que, a pesar de ser un reto importante para las empresas, se convierte en una ventaja competitiva”, ha señalado Carmen Esteban.
Por otro, las marcas tienen el desafío de la digitalización, que va desde la mejora de procesos y de las cadenas de suministro hasta las predicciones de mercado a través del Big Data y la Inteligencia Artificial, incluyendo la comunicación a través de redes sociales.
Notificación de los efectos no deseados
Además, la feria también ha servido para poner en valor NotificaCS, el portal de notificación de efectos no deseados relacionados con productos cosméticos y uno de los sistemas de seguridad más consolidados a nivel europeo. Según Cristina Arizmendi, jefa de servicio de cosmetovigilancia y seguridad de productos cosméticos de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), “la notificación del efecto no deseado relacionado con un producto no implica necesariamente que el producto sea inseguro, si no que ayuda a reducir la incidencia de dichos efectos e incluso a prevenirlos”.
En ese sentido, ha asegurado que “sirve para ayudar a que los productos sean seguros, se trata de una garantía sanitaria adicional a todas las regulaciones y leyes que ya hay que seguir”.