La elaboración del listado de webs fiables en farmacia forma parte de la alianza entre FEFCAM y #SaludsinBulos, rubricada el pasado mes de julio. Los sitios web que componen esta recopilación tienen como denominadores comunes contar con profesionales de la farmacia con una amplia trayectoria como autores reconocidos, aportar fuentes creíbles y datos contrastables en todas sus informaciones.
En la lista hay blogs que incluyen consejos sobre nutrición, cuidado infantil, belleza o problemas comunes de salud, además de informaciones sobre calendarios vacunales, alertas sanitarias, medicamentos y tratamientos de las patologías más prevalentes, entre otros asuntos.
Para Mariano González, presidente de FEFCAM, «el farmacéutico, como el profesional más próximo al paciente, debe ejercer una labor fundamental de educación e información sanitaria. Las webs que componen nuestra lista desempeñan una gran tarea en este sentido y son recomendables para todos los ciudadanos. Con ello trataremos de evitar que muchas personas acudan a portales de nula credibilidad, divulgadores de bulos, para buscar información sobre enfermedades y medicamentos o consejos de salud», añade.
Presencia en redes sociales
Instituciones sanitarias como el Colegio de Farmacéuticos de Sevilla y el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos aparecen en el listado efectuado por FEFCAM y #SaludsinBulos, además de farmacéuticas con gran presencia en redes sociales y popularidad como Marián García, la boticaria García, y María José Cachafeiro, autora del blog La botica de Teté. Ambas profesionales forman parte de la red de cazabulos de #SaludsinBulos y se han distinguido por una intensa labor en los últimos años en desmontar mitos y noticias falsas de salud.
Según explica Carlos Mateos, coordinador de #SaludsinBulos, «desde la farmacia se hace una labor divulgativa muy necesaria en salud y algunos farmacéuticos han extendido esa divulgación a la Red con contenidos destinados a frenar la desinformación, que ha crecido en los últimos años. Se trata de aprovechar esos recursos para educar en salud y que los ciudadanos confíen más en su farmacéutico que en doctor Google».