Entre todos trataron de dar respuesta al modelo de atención primaria (AP) actual, «ya que la AP vive un momento dramático, sobre todo en algunas comunidades, y creemos que es urgente poner soluciones», afirmó Francisco Igea. «Nos encontramos ante un escenario donde se van a perder, en los próximos 10 años, el 20% de los médicos de familia y el 50% de los facultativos», continuó explicando el portavoz de ciudadanos. Para Antonio Alemany, uno de los mayores problemas es que «formamos a médicos de familia para hacer lo que no se han formado para hacer, y es una de las causas de la desmotivación de la AP». «Hace falta más financiación, pero hay que tener claro para qué, y para solucionar esto se deben conocer los puntos de vista de todos los agentes implicados (políticos, pacientes, ciudadanos y profesionales sanitarios)».
La AP española siempre ha sido pionera, «aunque ha ido perdiendo liderazgo en los últimos años», aseguró Antonio Pareja. «Desde el Ministerio decidimos que era prioritario volver a ubicar a la AP en lo más alto», aclaró el vocal asesor encargado de la estrategia de AP.
Para conseguir avanzar y no quedarse al margen, es fundamental estar al día con las últimas tendencias en tecnología, ya que, como aseguró Francisco Igea, lo que «no puede ser es utilizar el uso hospitalario como el uso de control de precios. Eso es otra ineficacia que pagan los ciudadanos». En la misma línea, Antonio Pareja aseguró que «en AP tenemos una tecnología que no tienen otros como es el poder de la palabra y eso tiene una fuerza extraordinaria».
Colaboración
El I Congreso Nacional SEMERGEN-SEFAC surge de la necesidad de desarrollar y mantener una estrecha colaboración entre ambas profesiones. «Estamos ante una iniciativa pionera en nuestro país, en Europa y, probablemente, también a nivel mundial. Con este congreso queremos luchar por el paciente», señaló el Dr. Llisterri.
Por su parte, Jesús C. Gómez abogó por la necesidad de que la farmacia comunitaria esté presente en los foros en los que se trata de adecuar la AP a las necesidades actuales de la población, reivindicando la necesidad de que los profesionales de salud se coordinen y complementen en áreas como la atención domiciliaria.