Así lo ha dado a conocer el colegio farmacéutico pacense. Su presidente, Cecilio Venegas, ha razonado esta colaboración, ya que una persona, de media, pasa 14 veces al año por una oficina de farmacia. Su distribución por toda la provincia la convierten en un importante agente de vigilancia y sensibilización social. Venegas ha informado de que «el material ya ha llegado a las farmacias, junto con la explicación de cómo actuar ante un caso de maltrato. No son solo trípticos, sino que se los haremos llegar a personas que puedan necesitarlos y aconsejarles para que denuncien».
El presidente de este colegio profesional ha añadido que las mujeres tienen un perfil para que el farmacéutico, perfectamente formado gracias a la campaña «Hay salida», pueda detectar e identificar los síntomas de ese maltrato y así poder asesorar a la víctima. La violencia de género no está ligada ni a la edad, ni a la formación, ni a la ruralidad, y la proximidad de los farmacéuticos puede ayudar a quienes sufren estos casos para encontrar soluciones.