La ausencia de diferencia de precio entre las marcas y genéricos, las consecuencias negativas de las subastas de medicamentos en Andalucía o la imposibilidad de fabricación de genéricos en la fase de CPS (Certificado de Protección Suplementaria), con un incremento de la inversión industrial y la creación miles de empleos en el sector farmacéutico español, han sido algunos temas debatidos en la reunión que han mantenido las dos asociaciones.
En la actualidad, España es el único país de la UE que obliga a las empresas originarias a fijar al mismo precio los medicamentos sin patente que los genéricos. EGA y AESEG consideran que dicha política es perjudicial para la capacidad a largo plazo de la industria de medicamentos genéricos de ampliar el acceso de los pacientes y ofrecer un ahorro a los contribuyentes españoles, ya que, en su opinión, elimina el incentivo de los médicos a prescribir, el de los farmacéuticos a dispensar y el de los pacientes a solicitar medicamentos genéricos.
Las patronales EGA y AESEG han subrayado asimismo las consecuencias del sistema de subastas andaluz sobre el suministro de medicamentos (tales como la desigualdad al acceso del medicamento y el frecuente desabastecimiento) para pacientes y farmacéuticos, que, dicen, amenaza también la viabilidad de fabricantes europeos y españoles y reduce su capacidad de desarrollar y sacar nuevos medicamentos genéricos al mercado.
EGA prevé que entre el 75% y el 80% de los medicamentos utilizados en la UE serán genéricos o biosimilares en 2020, por lo que considera que tiene sentido aumentar la producción en Europa en lugar de en países de fuera de la UE. Han recordado también que la Comisión Europea acaba de proponer desarrollar una renuncia a fabricación con CPS que, dicen, permitiría la producción y exportación de medicamentos genéricos y biosimilares durante ese periodo, promoviendo así la fabricación de medicamentos, creando empleos altamente cualificados y generando un crecimiento económico en aquellos países en los que la producción de medicamentos genéricos y biosimilares es especialmente relevante, como en el caso de España.
Jacek Glinka, presidente de la EGA, ha señalado que «estamos preparados para trabajar con las autoridades españolas en el desarrollo de un negocio sostenible de genéricos y biosimilares en España, eliminando las barreras del mercado y aumentando la costo-eficacia de las terapias, permitiendo así a los médicos poder tratar a más pacientes con medicamentos de alta calidad».
Por su parte, Ángel Luis Rodríguez de la Cuerda, director general de AESEG, ha destacado que «7 de cada 10 medicamentos genéricos en España se fabrican en nuestro país. Una sana competencia de genéricos en el mercado español creará valor adicional y más empleo en España. Por lo tanto, la propuesta de la Comisión Europea de una renuncia a fabricación con CPS es también un elemento esencial para crear mayores oportunidades de fabricación y empleos en España. Hacemos un llamamiento al gobierno español para que apoye esta medida de creación de empleo en la UE».