En concreto, la media ha pasado de 9.125 pastillas mensuales a 7.114 para el mismo periodo del año anterior, con claras puntas de demanda en enero y julio de este año. Concretamente, en enero se dispensaron hasta 9.487 píldoras, mientras que en julio fueron 8.740, frente a las 6.259 de mayo, 6.730 de junio y las 5.608 de agosto. Hasta septiembre de 2010 se administraron un total de 82.853 unidades, y 108.503 hasta final de año, mientras que de enero a septiembre de este año se han dispensado un total de 64.024.
Desde septiembre de 2009, estas pastillas se pueden comprar sin receta en las oficinas de farmacia españolas por un precio de unos 20 euros. Las boticas catalanas han distribuido desde entonces un total de 205.159 unidades, produciéndose el mayor pico de demanda con las 10.896 píldoras dispensadas en julio de 2010, seguidas de las 10.120 de diciembre de 2009.
Las chicas de entre 15 y 19 años copan (35,3%) la mayoría de demandas de la píldora, seguidas por las chicas de 20 a 24 (24,8%) y de 25 a 28 (16,8%), aunque un 1,6% de las chicas tenían de 11 a 14 años.