De este modo, son ya catorce las comunidades que cuentan con este servicio común, con el que ya estaban trabajando Aragón, Canarias, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Comunidad Foral de Navarra, Comunidad Valenciana, Extremadura, Galicia y La Rioja.
Las cinco nuevas comunidades validadas iniciarán efectivamente el servicio a los ciudadanos de forma inmediata, si bien alguna de ellas lo hará a lo largo del mes de enero.
Esto significa que 1.344 nuevos centros de salud y consultorios de atención primaria y 5.252 farmacias se añadirán a los dispositivos que pueden prescribir y dispensar recetas interoperables.
Las 14 comunidades con servicio certificado de interoperabilidad suponen el 80% de los centros de atención primaria y el 68% de las oficinas de farmacia, dando servicio al 65% de la población.
Las siguientes comunidades que estarán en condiciones de cumplir los requisitos para que el Ministerio de Sanidad autorice su entrada son el INGESA (Ceuta y Melilla), Andalucía, Baleares y la Comunidad de Madrid, que también están trabajando en adaptar sus sistemas. Con ello, la receta electrónica sería interoperable en todo el Sistema Nacional de Salud.