De los datos recogidos durante seis meses de investigación se desprende también que los pacientes que recibieron el servicio de seguimiento farmacoterapéutico experimentaron una mejora significativa de la calidad de vida percibida, con un incremento de 6,6 puntos de media. Los análisis farmacoeconómicos realizados han mostrado que este servicio es muy coste-efectivo, y sus resultados se han expresado en términos de ratio coste-efectividad incremental (RCEI).
En este sentido, según ha detallado el profesor de la Universidad de Granada Fernando Martínez «aunque no existen estándares oficiales para su interpretación, es habitual utilizar como referencia el umbral de 30.000 €/AVAC (Años de vida ajustados a calidad), es decir si el coste de ganar un año de calidad de vida está por debajo de 30.000 euros se considera un servicio coste-efectivo». Para valoración del RCEI se establecieron tres escenarios. El primero contabilizaba la medicación, el tiempo de intervención del farmacéutico y los gastos asociados al servicio de seguimiento farmacoterapéutico, resultando un valor de sólo 9.365 euros. En el segundo se añadieron las visitas a urgencias, mejorando el RCEI con un valor de 7.486 euros. En el tercero, añadiendo los ingresos hospitalarios resulta un valor de RCEI conocido como «Dominante», lo que significa que el servicio tiene un coste asociado muy bajo y un beneficio muy alto; es decir el servicio es altamente coste-efectivo.
Sin embargo, aún no se han realizado los análisis oportunos que demuestren una relación causa-efecto entre la provisión del servicio de seguimiento farmacoterapéutico y la reducción de los ingresos hospitalarios.
Durante la presentación del estudio la secretaria general del Consejo General de Farmacéuticos, Ana Aliaga, ha querido destacar la importancia de la colaboración con el resto de profesionales sanitarios para abordar el problema que representa a nivel internacional la morbi-mortalidad relacionada con el uso de los medicamentos. Además, ha continuado, «estamos promoviendo la investigación de resultados en salud y la protocolización de los servicios profesionales farmacéuticos, convencidos de que la labor del farmacéutico puede contribuir a la mejora de la salud y a la sostenibilidad del sistema sanitario, como así ha demostrado conSIGUE». Por último, la secretaria general ha anunciado que en breve se iniciará la segunda fase de conSIGUE, que va a abordar la implantación del servicio de seguimiento farmacoterapéutico en las farmacias.