Asegurar una financiación acorde con las prioridades de España, conseguir la autonomía y coordinación de las entidades financiadoras de I+D+i e incorporar, recuperar y consolidar el talento científico e innovador son los tres compromisos principales de este Pacto, que ya han suscrito más de 70 organizaciones del ámbito de la ciencia, la universidad, el mundo empresarial y los sindicatos.
«La crisis sanitaria de la COVID-19 ha puesto de relieve el papel fundamental que juega la ciencia para la sociedad española y en la toma de decisiones de las administraciones, así como la necesidad de crear un modelo de investigación y desarrollo sólido, europeista y abierto a todos los actores, públicos y privados», afirma el director general de anefp, Jaume Pey.
El Pacto se enmarca dentro de la Estrategia Española de Ciencia, Tecnología e Innovación para el periodo 2021-2027, uno de cuyos principales objetivos es fomentar la inversión privada en innovación y ciencia para duplicar la suma de inversiones pública y privada en I+D+i, hasta alcanzar en 2027 el 2,12% del PIB.
«La inversión en investigación y desarrollo dentro del ámbito de la salud es uno de los ejes básicos de la Estrategia Española de Ciencia, Tecnología e Innovación y el sector del autocuidado quiere formar parte de ese impulso», afirma el director general de anefp, quien también incide en la contribución del sector de autocuidado «a la búsqueda constante de innovación y su apoyo al desarrollo de la ciencia en España, porque creemos que es un pilar fundamental para garantizar el progreso de nuestro país», concluye Jaume Pey.