Aguilar detalló ante los congresistas los grandes retos a los que está haciendo frente la farmacia. «Son retos –dijo– en los que la implicación de la farmacia comunitaria, como red sanitaria, es clave para los alcanzar los resultados en salud esperados». Durante su exposición Jesús Aguilar enumeró algunos de estos retos, como son la prevención de enfermedades no transmisibles y la promoción de la salud, el abordaje integral de la cronicidad y el envejecimiento, la aplicación de las tecnologías a la salud, la medicina personalizada o los nuevos roles de los profesionales sanitarios.
En este contexto Jesús Aguilar destacó que «por nuestros conocimientos y accesibilidad, los farmacéuticos comunitarios tenemos que prestar servicios que mejoran los resultados de la farmacoterapia y la prevención. Servicios que son costo-eficientes, y que pueden contribuir a mejorar la efectividad de las inversiones en salud». Así, puso como ejemplo los resultados del proyecto conSIGUE, de seguimiento farmacoterapéutico a los pacientes mayores, crónicos y polimedicados. Un programa cuya fase de investigación, explicó, ha demostrado que la intervención de los farmacéuticos con estos pacientes permite reducir entre otros las visitas a urgencias y los ingresos hospitalarios. «Si se hiciese este seguimiento a todos estos pacientes se podrían ahorrar hasta 2.272 millones de euros al sistema sanitario», concluyó.