Sea como sea, lo que también quedó claro es que Infarma sigue batiendo récords. El encuentro congregó a un total de 33.779 visitantes: 16.082 farmacéuticos, 14.217 profesionales (auxiliares, industria, servicios y otros) y 3.480 congresistas y ponentes nacionales e internacionales, lo que supuso un aumento del 10% de asistencia. Y lo mismo ocurrió con el número de expositores: 406, entre laboratorios y empresas; es decir, un crecimiento del 7% respecto a la edición anterior.
A modo de resumen, quizá podríamos quedarnos con las palabras que pronunció en el acto inaugural Jordi de Dalmases, presidente del Col·legi de Farmacèutics de Barcelona, cuando se refirió a los dos retos que afronta la profesión farmacéutica. El primero, la digitalización del sector, «donde debemos estar preparados para aprovechar las oportunidades que nos puede proporcionar la tecnología». Y el segundo, el envejecimiento progresivo de la población y la cronificación de las enfermedades, donde es crucial «definir cómo se resolverá este desafío en el mundo sanitario y concretar el papel que tendrá el farmacéutico como profesional cercano a la población».
Y un detalle quizás anecdótico, pero que podría no serlo tanto: éste era el último Infarma para Francisca Aranzana y Jordi de Dalmases, como directora y presidente, respectivamente. Es cierto que la maquinaria de Infarma es enorme (tres equipos: los COF de Madrid y Barcelona e Interalia), pero las personas siempre cuentan. Sus sucesores tendrán un reto importante. Pero antes, los días 10, 11 y 12 de marzo de 2020, la cita volverá a ser en Madrid.
«El lema de este año de Infarma, “La salud nos conecta”, destaca el objetivo común de mejorar la salud de las personas mediante la innovación, en el que es importante conectar a todos los agentes sanitarios, desde la Administración hasta los profesionales, las empresas, el entorno, los ciudadanos y los pacientes.» Son las palabras con las que Alba Vergés, consellera de Salut de la Generalitat de Catalunya, interpretó los objetivos de Infarma 2019 en el acto inaugural, y lo cierto es que avanzó con bastante acierto lo que vendría después. La misma conferencia inaugural, pronunciada por el Dr. Julio Mayol, director médico del Hospital Clínico San Carlos, sirvió para reafirmar sus palabras. «Los farmacéuticos pueden funcionar como sensores inteligentes para ayudar a los ciudadanos a conseguir una mejor adherencia a los medicamentos, que es el gran fracaso del sistema sanitario», explicó el Dr. Mayol, para luego hacer hincapié en la importancia de que el sector farmacéutico se sume a la innovación sanitaria para progresar y estar cada vez más cerca de los ciudadanos.
Según el Dr. Mayol, la tecnología y los conocimientos «supondrán un cambio en el modelo de prestación de servicios, pero la verdadera innovación estará en ponerlos al servicio de las personas. El gran reto de la farmacia comunitaria –añadió– es su papel en la lucha contra la despersonalización. La atención personalizada es la clave para mantener la relevancia de las oficinas de farmacia. Las nuevas tecnologías permitirán al farmacéutico descargarse de tareas que no son significativas para su trabajo y liberarse para seguir aprendiendo y generando valor para el ciudadano».
Mesas de actualidad
Durante los 3 intensos días de congreso se celebraron 7 mesas de actualidad y 32 aulas profesionales que contaron con 170 ponentes y moderadores. Sin duda, quienes estuvieron atentos al programa y se organizaron bien el tiempo salieron de Infarma con una visión precisa del presente y futuro de la profesión.
Internet y el comportamiento del consumidor, la atención domiciliaria y sus límites legales, la prestación de servicios farmacéuticos en residencias, las causas de los desabastecimientos y sus posibles soluciones, la implantación del SEVeM, los retos del comercio electrónico o el impacto del Brexit en la farmacia comunitaria fueron los temas que coparon las mesas de actualidad, pero no menos importantes fueron las aulas profesionales. Al igual que en otras ediciones de Infarma, los temas de gestión volvieron a triunfar, confirmando que los farmacéuticos se interesan por descubrir nuevas formas de rentabilizar sus farmacias. Sin embargo, también se observaron llenos importantes en las sesiones de temas profesionales más «clásicos», como el tratamiento del Alzheimer y el papel de los farmacéuticos, cáncer y epigenética, el tratamiento futuro de la diabetes, el uso medicinal del cannabis...
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Punto y aparte fueron las sesiones de la segunda edición de #InfarmaInnova, que premiaron tres ideas: «2sis (Dosis)», centrada en la mejora de la adherencia en pacientes mayores; «Receta electrónica en app», para optimizar la gestión de la receta electrónica, y «Tu farmacia, más cerca de lo que crees», cuyo objetivo es la resolución de dudas de los jóvenes.
Los premios se dieron a conocer durante un acto en el que las diez ideas finalistas fueron valoradas por un jurado compuesto por miembros de diferentes colegios de farmacéuticos de España, así como por representantes de fedefarma y Caixabank y del Área de Innovación y Transformación Digital del Hospital del Mar de Barcelona.
Las 148 ideas recibidas en total en esta iniciativa, que perseguía solucionar retos presentes y futuros de la farmacia comunitaria, reflejan la gran participación que ha generado el proyecto, en el que también se han adherido un total de 31 colegios oficiales de farmacéuticos de toda España.
Francisca Aranzana explicó durante el acto que #InfarmaInnova es «la apuesta de los colegios de Barcelona y Madrid para impulsar la innovación y posicionar a Infarma como un evento donde se construyen el presente y el futuro de la oficina de farmacia».
La Sala Luz de Gas de Barcelona acogió el concierto benéfico de Los Manolos para recaudar fondos para el proyecto «Supervisión del servicio de Farmacia del Hospital de Gambo en Etiopía», de la Fundación El Alto, entidad ganadora de la nueva edición de Infarma Solidario, que recibió 9.000 euros para su proyecto.
Farmacéuticos Sin Fronteras, Farmacéuticos Mundi y las fundaciones Amigos de Monkole y Nuestros Pe-queños Hermanos fueron las organizaciones finalistas, cuyos proyectos recibieron una aportación de 4.000 euros cada una.
Pósteres científicos
Durante la clausura se entregaron los premios a tres pósteres científicos de los 126 presentados. El póster «Epigallocatechin-3-gallate polymeric nanoparticles: a nanotechnologic approach for the treatment of Alzheimer’s disease» quedó en primer lugar y recibió los 2.000 euros del premio. Los trabajos «Protocolo de intervención comunitaria en tabaquismo, PICT: integración de farmacias y equipo de atención primaria de Pineda de Mar» e «Intervención en atención primaria y farmacia comunitaria para mejorar la no iniciación farmacológica en la diabetes y la enfermedad cardiovascular» fueron premiados con 1.000 euros cada uno.