En concreto, 180.000 dosis se destinarán a las personas que viven junto a uno de los basureros más grandes de Centroamérica (con un tamaño equivalente a ocho estadios de fútbol), situado en la ciudad de Guatemala. Este vertedero es un foco de contaminación por la materia orgánica que se aboca diariamente y que se descompone rápidamente por las altas temperaturas. La ONG EducAcciONG ha puesto en marcha en esta zona un centro de alfabetización y de atención médica dirigido principalmente a mujeres y niños.
El resto de la donación será repartida en los campamentos saharauis de Tinduf (Argelia), en los que conviven en situación precaria más de 100.000 personas desde hace 20 años. La asociación SALAM-PAZ colabora en estos campos a raíz de la propia implicación personal de los miembros de la ONG, conocedores de esta situación a través de su participación en los programas de acogida de niños saharauis durante los meses de verano.
Para José Campos, director general de Ferrer Consumer Health, «nuestra responsabilidad de contribuir a mejorar la salud y el estado de bienestar de las personas no sólo se circunscribe a nuestro entorno, sino también a aquellos que viven en condiciones difíciles. Gracias a Farmacéuticos Sin Fronteras hemos tenido ocasión de conocer algunas situaciones en las que conseguir un analgésico es un lujo inalcanzable, algo difícil de imaginar en nuestro mundo donde la gripe o un dolor leve se pueden sobrellevar con la sola ingesta de una pastilla».
Gelocatil 250 mg es un medicamento de uso pediátrico indicado para niños de 5 a 7 años. La donación es especialmente útil para su administración en situaciones de precariedad, ya que se presenta en formato granulado en sobres unidosis que se vierten directamente en la boca sin necesidad de agua.