El Plan de Reequilibrio Financiero del gobierno extremeño busca ahorrar 163 millones de euros y así llegar al mandato de Bruselas de un déficit máximo del 1,5% del PIB regional. De esos millones, a la Consejería de Salud le toca cuadrar sus cuentas para llegar a economizar al menos 25 millones de euros y, además, pactar una rebaja del plus que reciben 11.000 funcionarios, muchos pertenecientes a la sanidad, por la carrera profesional. La Consejería recurriría a ajustar las partidas de medicamentos y el material sanitario y de este modo alcanzar esa cantidad. Hay abiertas distintas vías de negociación con sindicatos y colectivos, aunque el portavoz del Sindicato Médico de Extremadura, José Luis Vilella, se opone «a que se detraiga ninguna cantidad de Sanidad, pues es un pilar básico de nuestra sociedad». En su opinión, si se recorta en medicinas o vacunas y en otoño irrumpiera una gripe violenta, «nos hundiría por los efectos que tendría».
Las cifras del consejero
El consejero de Salud, Luis Alfonso Hernández Carrón, apuntaba que Extremadura es la región con mayor gasto farmacéutico por persona, 297 euros, cuando la media estatal es de 236. La causa estaría en el envejecimiento de la población, en el que el tramo de edad de más de 65 años es notable. Y los recursos que se necesitan también. Carrón añadió que el aumento del copago farmacéutico en un 10% es una cuestión de justicia social, pues se pagará «en función de la renta, pero unos 41.000 extremeños necesitados seguirán teniendo gratis sus medicinas sin coste alguno».
