Marichu Rodríguez fue la primera en intervenir y lo hizo reivindicando que «el potencial sanitario de los farmacéuticos comunitarios no puede ser ni desaprovechado ni ignorado por la Administración sanitaria» y añadió que «los farmacéuticos están llamados a desempeñar un papel más relevante en el Sistema Nacional de Salud, tanto en la prevención como en la promoción de la salud y en el buen uso de los medicamentos».
Jesús Gómez señaló que «contra los recortes y los impuestos los farmacéuticos comunitarios aportan eficiencia» e insistió en ello al expresar su satisfacción porque a pesar de «la crisis, los impagos, las huelgas, los recortes, los impuestos y las amenazas los farmacéuticos hemos reventado estadísticas de participación en este congreso». No obstante, Jesús Gómez no pudo evitar, al igual que había hecho antes Marichu Rodríguez, lamentar la inexplicable ausencia del Ministerio de Sanidad en el acto inaugural. «Ellos sabrán», remató.
Por su parte, Jordi de Dalmases habló de los «tiempos difíciles» que vive la farmacia a causa de los impagos, a pesar de lo cual animó a los asistentes a trabajar con optimismo y pensar en positivo para que entre todo el colectivo se pueda conseguir que la farmacia siga siendo un agente sanitario relevante en el futuro. «Nadie lo hará por nosotros», puntualizó. De Dalmases aprovechó su intervención para recordar la situación especialmente difícil que atraviesan los farmacéuticos de Castilla-La Mancha y la Comunidad Valenciana.
Joaquim Forn cerró el turno de intervenciones reconociendo«el rol destacado que tienen los farmacéuticos comunitarios en el sistema sanitario» y agradeció su «profesionalidad y responsabilidad en el cuidado de la salud de las personas».