La EPOC es la sexta causa de muerte en la comunidad, la cuarta en varones, y provoca la muerte de 500 aragoneses al año, según el estudio de mortalidad en Aragón para el año 2007
La accesibilidad y proximidad a los ciudadanos de los farmacéuticos los convierte en agentes sanitarios fundamentales para conseguir una detección precoz de la enfermedad y para mejorar la atención de estos pacientes crónicos. Para apoyar esta labor, la organización colegial ha publicado esta monografía estructurada en 14 capítulos que estudian las manifestaciones clínicas, diagnóstico, tratamiento y la relación de EPOC y tabaquismo. Elaborada por 10 farmacéuticos y coordinada por la responsable de atención farmacéutica del COF de Zaragoza, Paz Jiménez, la monografía que ha sido revisada por el neumólogo del Hospital Clínico de Zaragoza, Joaquín Costán, ha sido editada con la colaboración de laboratorios AstraZeneca.
La monografía hace especial hincapié en la labor del farmacéutico para apoyar a los pacientes en el abandono del hábito tabáquico. El vocal de Atención Farmacéutica de la organización colegial, Luis Hernández Tomás, destaca que dejar de fumar debe ser el primer objetivo del tratamiento en todos los pacientes con EPOC, ya que es la mejor medida para reducir el riesgo de desarrollar EPOC y frenar su progresión. «Los farmacéuticos son profesionales sanitarios que pueden ayudar a los ciudadanos que así lo deseen a dejar de fumar», destaca Hernández, que también señala que dejar de fumar en cualquier fase de la evolución de la enfermedad aumenta la expectativa y la calidad de vida del paciente, «aunque la mejoría será mayor cuanto antes se abandone el tabaco», recuerda.