El Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM) ha facilitado este proceso de cambio a través de su Centro de Atención al Usuario (CAU), que tramitó 39.687 consultas de sus colegiados entre el 1 de marzo de 2013 y el 31 de enero de 2014. La complejidad de las medidas aprobadas durante el último año y la premura para aplicarlas en muchos casos han obligado a reforzar los servicios del CAU para aclarar y resolver las dudas planteadas por los colegiados.
El funcionamiento de la nueva aplicación informática SISCATA, que sirve para validar la receta y calcular el límite máximo de aportación farmacéutica de los ciudadanos con el fin de que no tengan que adelantar dinero de más por sus recetas, motivó 14.614 consultas, el 36,8% del total tramitado por el CAU. Las cuestiones generales sobre esta nueva herramienta que entró en funcionamiento el pasado 1 de marzo, así como la confirmación de registro o su anulación fueron las preguntas más veces planteadas.
Junto a SISCATA, el despliegue de la receta electrónica por fases en las oficinas de farmacia de la Comunidad de Madrid absorbió casi una de cada cuatro consultas tramitadas. Hasta 8.859 peticiones ha atendido el CAU relacionadas con este nuevo sistema de dispensación.
El resto de cuestiones atendidas se reparte entre la red de comunicaciones VPN-IP, que ofrece una mayor seguridad y fiabilidad en la implantación de la receta electrónica tal y como obliga el Real Decreto-ley 9/2011, el IPAF, la facturación o la tramitación de certificados.
El COF de Madrid tramitó cerca de 40.000 consultas de los colegiados
Los farmacéuticos de la Comunidad de Madrid se han adaptado a los múltiples cambios introducidos en la dispensación y en el sistema de aportación farmacéutica decretados por el Gobierno central, así como a la implantación progresiva de la receta electrónica en las oficinas de farmacia de la región.