En concreto, la Dra. Sánchez afirma que «son diversos los problemas cutáneos que puede llegar a provocar el uso excesivo de gel hidroalcohólico y el lavado de manos constante. No es necesario dejar de usarlo, pero sí que debemos tener en consideración ciertas recomendaciones que harán que nuestra piel no se resienta tanto». Asimismo, añade que «las personas con pieles con tendencia atópica tienen más probabilidad de sufrir alguna alteración en la piel al usar geles hidroalcohólicos».
Por ello, es importante que sigan estas recomendaciones:
• Hidrata tus manos. Lávate las manos siempre que sea necesario, pero cada vez que lo hagas usa crema hidratante para que no se resequen demasiado.
• Gel de marcas dermatológicas. En la medida de lo posible, intenta usar geles hidroalcohólicos de marcas dermatológicas con los que te asegures que el producto va a ser menos dañino para tu piel.
• Repasa los ingredientes. Fíjate en la etiqueta del producto y trata de elegir uno que no contenga perfumes ni conservantes. Cuantos más ingredientes contenga, mayor es la posibilidad de que tu piel reaccione de alguna forma no deseada.
• Usa alcohol. Si no dispones de gel o notas que el que estás usando está afectando a tu piel, lo más recomendable es usar directamente alcohol con una concentración del 60%-70%.
• Siempre y cuando tu piel lo requiera, elige los guantes desechables antes que el gel hidroalcohólico. Si tu piel está resentida y entras en un establecimiento y existe la opción de ponerte gel o usar guantes desechables, siempre que sea posible usa los guantes.