La Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (SEFAC) ha celebrado en Badajoz, con la colaboración del Colegio Oficial de Farmacéuticos (COF) de Badajoz, una nueva cita de sus jornadas SEFAC, que tienen como objetivo brindar a todos los farmacéuticos comunitarios la oportunidad de actualizar sus conocimientos científicos y conocer los nuevos retos profesionales del colectivo. En este evento se han dado cita más de un centenar de profesionales farmacéuticos que han analizado la situación actual por la que atraviesa el sector, además de reforzar y actualizar conocimientos.
El inicio de la jornada ha contado con la participación de Vicente Alonso Núñez, director general de Asistencia sanitaria del Servicio Extremeño de Salud, Vicente J. Baixauli, presidente de SEFAC, Celia de Miguel, presidenta de SEFAC Extremadura, y Cecilio Venegas, presidente del COF de Badajoz. Por su parte, Nuñez ha considerado que la farmacia comunitaria ha estado «al pie del cañón al lado del paciente, garantizando la continuidad en sus tratamientos en circunstancias muy difíciles». Asimismo, Baixauli ha señalado que la pandemia ha obligado al sistema de salud a acelerar entre 10 y 15 años los avances tecnológicos: «La farmacia tiene que ver cómo puede entrar dentro de esos nuevos circuitos en coordinación con el resto de profesionales», ha añadido.
El programa ha incluido la sesión titulada «La farmacia comunitaria como centro sanitario: debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades». En esta mesa distintos expertos han analizado la situación actual del sector, entre ellos Margarita Mora Carreño, consultora y responsable de Morafer Asesoría, quien ha hecho un llamamiento a los asistentes a seguir formándose para ofrecer el mejor asesoramiento posible al paciente, y a superar su «tradicional conservadurismo» para arriesgar y ofrecer una cartera de servicios más completa.
En el capítulo de amenazas, Antonio Pérez Ostos, presidente de Bidafarma, ha alertado sobre una posible liberalización que podría cambiar el modelo actual de farmacia. En el apartado de fortalezas, Venegas, ha apelado al factor humano de la profesión, poniendo en valor la presencia en la red de farmacias comunitarias española de profesionales sanitarios con titulación universitaria y altamente cualificados. En esta misma línea, Celia de Miguel, ha recalcado la necesidad de una mayor implantación en la profesión de servicios profesionales farmacéuticos asistenciales.
El otro gran reto del sector, además de reforzar la vertiente clínica y asistencial, es encarar la transformación digital para adaptarse a los cambios profundos que traen las nuevas tecnologías a nivel social. Así lo han explicado el presidente de SEFAC y María Elena Serrano, consejera de la distribuidora Cofares. Para Baixauli, es fundamental que los farmacéuticos comunitarios sean capaces de desarrollar un modelo dual: «Debemos ser capaces de adaptar los servicios profesionales farmacéuticos asistenciales a las tecnologías digitales, pero sin poner en riesgo la humanización de la asistencia».
Baixauli ha señalado la necesidad de utilizar nuevos conceptos para explicar nuevas realidades. En su opinión, si se quiere hablar de la farmacia digital de presente y futuro, no cabe hablar de telefarmacia, sino de «teleatención farmacéutica». Por último, ha hablado de la necesidad de aplicar prácticas colaborativas entre las farmacias comunitarias españolas para afrontar los nuevos retos tecnológicos.