La conversación con Guillermo Bagaría nos lleva a pensar que estamos a las puertas de una edición de Infarma histórica. Su ilusión es contagiosa: «Somos una profesión que está muy viva, que tiene muchas inquietudes, muchas novedades», asegura, y no se detiene: «La actividad es muy intensa, casi diría que frenética, y tenemos unos niveles de participación y de entusiasmo en todo el arco del medicamento que nos congratulan y enorgullecen».
—¿Qué es Infarma?
—Infarma es un punto de encuentro de profesionales, de ideas, de industria, de novedades... Es un punto de convergencia de todas estas cosas. Por tanto, planteamos Infarma con la intención de que sea un lugar donde compartimos y donde nos impulsamos. Salimos refrendados por un consenso y un debate sobre los temas de actualidad que preocupan a la profesión.
—¿Con qué objetivos se ha planteado Infarma Barcelona 2023?
—El objetivo es retomar ese impulso, esa ilusión, esa proyección de profesión que comentaba antes, con la finalidad de converger, sumar y proyectar de forma conjunta y colaborativa una profesión que se enfrenta a muchísimos retos. Analizarlos, consensuarlos, debatirlos y proyectarlos es algo que tenemos que hacer unidos. Infarma tiene ese anhelo: que trabajemos de forma conjunta para impulsar la profesión.
—Infarma se alterna entre Madrid y Barcelona. ¿Qué fortalezas aporta el trabajo conjunto?
—El trabajo conjunto entre dos colegios de farmacéuticos potentes como son los de Madrid y Barcelona nos ha dado muy buenos resultados, y estamos muy orgullosos de esa colaboración íntima entre visiones, que a veces no son las mismas entre comunidades autónomas. Pero eso nos enriquece en lugar de empobrecernos; no genera fricción, sino impulso. El interés de Infarma es continuar avanzando en esa línea pero huyendo de la bicefalia, de modo que buscamos que el resto de los colegios oficiales de farmacéuticos del territorio nacional se sientan partícipes de esta fiesta que es Infarma, que colaboren y aporten, de manera que seamos todos los que hagamos de Infarma un proyecto conjunto.
—¿Qué nos puede destacar del programa científico? ¿Cuáles son los grandes temas que se van a tratar en esta edición?
—Hemos buscado referentes nacionales que nos proporcionen una visión global de los problemas habituales de nuestra profesión. Así, hablaremos de los esfuerzos de la corporación en los avances en la digitalización y de dónde está la sociedad. Debatiremos si estamos avanzando correctamente en estos esfuerzos de digitalización. También trataremos la atención domiciliaria. Son temas muy controvertidos, de los cuales es necesario abrir el debate. Hablaremos también de la evolución de la receta electrónica, de la relación entre los profesionales sanitarios, de farmacogenética, de ortopedia, de formulación magistral... Hablaremos de todos aquellos campos donde la profesión se expresa y se desarrolla, y que tienen aspectos interesantes para ser comentados y debatidos.
—La innovación ha estado presente en Infarma desde sus inicios. ¿Va a haber alguna novedad en cuanto a formatos o contenidos?
—Así es. Infarma ha de continuar siendo un punto de promoción de novedades, un punto donde les demos visibilidad, y dedicaremos un espacio concreto para que se puedan trasladar esas iniciativas. Las llamamos «Iniciativas de éxito», y dedicaremos una sala específica, con un calendario y un programa específicos, para que las diferentes iniciativas de los distintos colegios oficiales de farmacéuticos tengan un espacio para ser compartidas y debatidas. Con ello continuamos con esa apuesta, e incido sobre lo mismo, que ya no solo pivota sobre la bicefalia de Madrid y Barcelona, sino que invitamos a cualquier colegio de farmacéuticos a presentar en este marco cualquier iniciativa que considere interesante.
—¿El congreso se podrá seguir online?
—Sí. Como novedad incorporamos este año la figura del congresista virtual, que tendrá acceso al contenido de todas las aulas y a todas las charlas de actualidad y profesionales. Esto responde a la necesidad lógica y a la evolución social respecto a la dificultad en la presencialidad y a la disponibilidad de herramientas que nos permiten llegar más lejos y tener más influencia, con el fin de acercar el congreso a todo aquel que tenga interés. Obviamente, nos interesa la presencialidad; apostamos por el contacto y la red de personas, y eso se consigue en el congreso, pero también somos sensibles a esas demandas de la profesión y a las dificultades para desplazarse. Por eso abrimos la posibilidad del congresista virtual, que, por un pago reducido de acceso al congreso, podrá disfrutar de su contenido en streaming.
Como novedad este año incorporamos la figura del congresista virtual, que tendrá acceso al contenido de todas las aulas y a todas las charlas de actualidad y profesionales
—¿Qué respuesta están encontrando desde la industria y la distribución farmacéutica?
—Estamos encontrando una fantástica respuesta, una fantástica acogida y muchísimas ganas de reemprender esa actividad, ese contacto, esa ilusión, esas ganas... Ciertamente, somos una profesión que está muy viva, que tiene muchas inquietudes, muchas novedades, y así lo vemos también palpitar en la contratación de metros cuadrados, en la participación de la distribución y de la industria, no tan solo en los stands sino también en mesas, novedades, exponews, etc. La actividad es muy intensa, casi diría que frenética, y tenemos unos niveles de participación y de entusiasmo en todo el arco del medicamento que nos congratulan y enorgullecen.
—En cuanto a asistencia de público, ¿cuál es la previsión?
—Haciendo referencia a datos prepandémicos de 2019, en la última edición que celebramos en Barcelona tuvimos más de 33 700 visitantes profesionales, 3400 congresistas y ponentes, y más de 400 expositores entre laboratorios y empresas. Lógicamente, esperamos superar ese listón que nos marcó Infarma 2019, y los números preliminares que tenemos hasta la fecha en cuanto a participación son muy elocuentes y están en la dirección de superar con creces la participación de 2019, lo cual nos hace sentirnos orgullosos y con muchas ganas de iniciar este congreso, que seguro será un éxito.
—La pandemia parece superada, pero la mascarilla sigue estando presente en muchos ámbitos. ¿Han previsto algo a este respecto?
—La lógica se impone. Respetaremos, como no puede ser de otra manera, la normativa que en ese momento esté vigente y respetaremos, por supuesto, la libertad individual de cada uno. Pero entendemos que la evolución lógica de lo que vemos en la calle hace que las medidas más restrictivas las veamos superadas. Por lo tanto, nos ceñiremos al sentido común, al sentido sanitario y a la lógica para aplicar y minimizar los riesgos, si es que en ese momento son necesarias medidas con ese fin.
—Respecto al espacio que ocupa Infarma en la Fira de Barcelona, ¿se mantiene? ¿Ha habido algún cambio?
—Sí que ha habido cambios. Como comentaba antes, la inercia del congreso conduce a una mayor contratación y a una mayor necesidad de espacios y de superficie. Hemos de agradecer el acompañamiento de Fira de Barcelona, que en todo momento ha estado predispuesta a ofrecernos soluciones para esa inquietud de crecimiento. Así, hemos pasado del Stand 4 a contratar el Stand 3, que tiene una superficie bastante mayor, de modo que el número de metros cuadrados se ha incrementado sustancialmente un 6 % respecto a 2019. El número de expositores también se ha incrementado considerablemente, un 14 % respecto a 2019. Lógicamente, esto nos obliga a contratar mayor espacio para que todos estemos más cómodos, para que se pueda circular, para que en los stands pueda haber un ambiente distendido, con espacio suficiente para desarrollar las actividades que se prevén.
—Por último, ¿qué mensaje quiere enviar a los visitantes de esta nueva edición de Infarma?
—Me gustaría invitar a todo el mundo a que picotee por todos los ámbitos de Infarma. No es solo un congreso ferial, no es solo un congreso científico, sino que hay muchísimo por ver y por hacer. Hay pósteres que presentar, animo a todo el mundo a presentar pósteres. Somos una profesión científica, y la ciencia se cultiva y se abona. Para ello también contamos con un apartado de pósteres científicos. En definitiva, animo a todo el mundo a que se lea el programa y se anime a venir a Barcelona. Creemos que la presencialidad es muy importante y enriquecedora, pero aquel que no pueda venir también tendrá la opción de inscribirse como congresista virtual.