"Escucha activa, empatía y confianza: tres aspectos clave del farmacéutico en el seguimiento del paciente oncológico"

Ishoo Budhrani (@unboticarioentuvida), autor y fundador de #JuntosXElCáncer, #JuntosXTuSalud y #JuntosXElCáncerdeMama, cierra nuestra serie de Historias de Éxito

https://youtu.be/qubXE__fy28

Ishoo Budhrani (@unboticarioentuvida) es inquieto, apasionado y con el firme propósito de trabajar en la formación sobre la atención y el seguimiento del paciente oncológico. Una personalidad arrolladora que no se detiene ante las dificultades, y que no va a cejar en su empeño de ayudar a los pacientes oncológicos y a sus cuidadores a través de la formación, empatía y, por supuesto, la escucha activa desde la oficina de farmacia. Como él mismo nos ha explicado, «si no hay investigación, no podemos avanzar en el cáncer; si no hay colaboración multidisciplinar, no avanzamos en el cáncer; y si los farmacéuticos no nos formamos, no avanzamos en el cáncer, con lo cual todavía nos queda mucho por hacer».

 

—¿Cómo se definiría como farmacéutico? 

—Fuera de la farmacia, como farmacéutico en general, soy una persona superinquieta; dentro de la oficina de farmacia, en la que tengo la suerte de estar como adjunto, soy una persona muy cercana y, sobre todo, responsable.  

—¿Cree que su perfil encaja en el de la mayoría del colectivo? 

—Si fuera hace veinte años, te diría que no, pero actualmente sí. Mucha gente se siente de alguna manera en línea conmigo y yo me siento en semejanza con muchísima gente. Todos estamos formándonos, usando redes sociales y trabajando a favor del paciente en la farmacia 2.0, la digital, para traerlo a la farmacia 1.0, la farmacia física. 

—¿Considera que la farmacia es un buen lugar para innovar y tener éxito? 

—Totalmente. La farmacia es un lugar desde el que nosotros debemos conocer todo el árbol genealógico del paciente en la farmacia 1.0, pero usar la 2.0 para que quienes no saben usar las redes sociales o no saben leer o escribir acudan a nuestra farmacia a través de sus familiares. La farmacia, evidentemente, es un escaparate para poder dispensar todo lo necesario a todas estas personas. 

—¿Cómo se puede medir el éxito de una farmacia? 

—Pues en el día a día. Siempre se ha dicho que cuanta más gente haga cola, es que algo bueno se está haciendo. 

—¿De qué trata #JuntosXTuSalud y #JuntosXElCáncer? ¿Cuáles son sus objetivos? 

—#JuntosXTuSalud nace por cuestiones personales. A mi madre le diagnosticaron un cáncer, un linfoma de Burkitt, hace ya más de seis años. Me empeciné en que tenía que hacer algo para que el farmacéutico tuviera una mejor formación sobre el cáncer, y en demostrar que los farmacéuticos estábamos preparados para ayudar al paciente oncológico. Con el paso del tiempo vino #JuntosXElCáncer y #JuntosXElCáncerdeMama, para ayudar a los farmacéuticos a formarnos en Oncología y generar un equipo multidisciplinar por medio de las redes sociales. Lo que queremos es dejar constancia de que la sociedad puede confiar en el farmacéutico. 

—¿Ha sido necesario realizar cambios en la farmacia?  

—Creo que no ha sido necesario hacer casi ningún cambio. Tengo la suerte de estar con un equipo de personas con un corazón inmenso y capitaneado por una gran titular como es Cristina Iniesta González-Casanova, de quien personalmente he de decir que hace las cosas muy bien. Ella es la «culpable» de muchos de mis éxitos, porque me ayuda y me apoya. Si ya tienes una noción de hacer las cosas bien, quieres ayudar al paciente y, sobre todo, a sus familiares, pues todo eso influye naturalmente en que todo funcione. 

—¿Cree que su proyecto es extrapolable a otras farmacias? 

—Creo que sí. Nuestro proyecto se basa realmente en ayudar a los pacientes y, sobre todo, en centrarnos en el rol del cuidador del paciente oncológico, que es el que sufre en silencio y el que, a veces, viene a la farmacia con la mirada gacha. Considero que muchas de las farmacias existentes en España están haciendo un trabajo muy bueno en Oncología, ayudando al paciente oncológico y a su cuidador, pero que no se exponen o no cuentan, siendo muchas de ellas farmacias rurales. Desde 2019, año en que nos dieron el primer premio nacional, se habla más de oncología: hoy en día, hay formaciones, másteres y cursos; mucha gente da lo mejor de sí para ayudar al paciente oncológico haciendo formación, escribiendo sobre oncología y trabajando de forma multidisciplinar, así que algo bueno hemos hecho. 

—¿Ha tenido que salvar alguna barrera? 

—Sí, la mía, la personal, y la de mi salud, porque soy cuidador de una paciente oncológica; soy farmacéutico adjunto que se dedica a ayudar al paciente; he podido ser paciente oncológico, porque me han hecho muchas pruebas debido a que el estrés genera muchos problemas de salud; y soy amigo de una persona cuya madre, hoy, tiene un cáncer de mama. Estoy como en el centro de un cubo de Rubik con los cuatro vértices, y la salud es mi barrera. Al final la salud se va deteriorando por todo el estrés generado al realizar todos los proyectos y por el día a día, pero es la vida que te ha tocado vivir, las cosas pasan por algo.  

Lo único que quería era que mi madre se curara, que a mí se me quitara el miedo, y que al menos otro hijo algún día fuera a una farmacia y comentara: Mi madre tiene cáncer, un linfoma de Burkitt, ¿usted me puede ayudar? 

 

—¿Qué cree que puede aportar el farmacéutico en el seguimiento del paciente oncológico? 

—La escucha activa, la empatía y la confianza.  

—¿Y por qué cree que es importante educar al paciente, a los cuidadores y a los profesionales sanitarios? 

—Porque el paciente probablemente puede llegar a ser cuidador, el paciente puede llegar a ser sanitario o pudo haber sido sanitario, y el paciente es un claro ejemplo de superación para todos nosotros.  

—Recibió el primer galardón en la II Edición de los Premios a la Innovación Social 2023 Farmacéuticos y ODS del Consejo General de Colegios Farmacéuticos. ¿Qué significa esto para usted? 

—Fueron los días más bonitos de mi vida. A veces uno nunca se imagina cosas en la vida, y pasan. Pero esto yo creo que es insoñable, y fue un reconocimiento de todo el Consejo General de Colegios Farmacéuticos, de todos los farmacéuticos de España, a un proyecto generado con la mayor humildad del mundo, sin querer pedir absolutamente nunca nada a cambio. Aprovecho la ocasión para dar las gracias a las más de 650 personas que han sido partícipes de #JuntosXTuSalud #JuntosXElCáncer y #JuntosXElCáncerdeMama durante casi seis años, pero también para pedir disculpas si he cometido algún error porque, evidentemente, llevar y planificar todo esto no es fácil. El reconocimiento general puso de manifiesto que el farmacéutico puede hacer proyectos para ayudar al paciente y al cuidador oncológico; que existe un proyecto oncológico que puede hacer de espejo para otras farmacias, y que se puede confiar en el farmacéutico para ayudar en los procesos oncológicos. 

El reconocimiento al proyecto #JuntosXElCáncer puso de manifiesto que el farmacéutico puede hacer proyectos para ayudar al paciente y al cuidador oncológico

 

—¿Se marcó un objetivo en concreto al empezar?  

—No. Yo lo único que quería era que mi madre se curara, que a mí se me quitara el miedo, y que al menos otro hijo algún día fuera a una farmacia y comentara: «Mi madre tiene cáncer, un linfoma de Burkitt. ¿Usted me puede ayudar?». Y no hacer lo que hice yo, que fue buscar por Internet, llamar a gente que no sabía nada al respecto, perderme en el abismo y no confiar en el grupo de trabajo oncológico. Hoy la vida y el tiempo me han demostrado que la farmacia puede ser esa cruz verde donde puedes ir, sentarte y preguntar; que tenemos que confiar en el equipo médico, en Oncología, en Enfermería, y también en todos los sanitarios dentro de un grupo de trabajo oncológico. Pero contestando a tu pregunta, yo no me generé ningún objetivo; de hecho, todo lo que me está pasando día a día es gracias a todos ustedes, y eso es de agradecer públicamente porque yo nunca imaginé llegar hasta aquí. 

—¿Cuáles son sus objetivos a largo plazo? 

—Honradamente, estoy feliz con que todo el mundo quiera colaborar conmigo en los proyectos del cáncer, feliz de que todo el mundo quiera llamarme para hacer mil cosas. Sé que hablar solo de oncología cuesta, es un tabú, es un miedo, da respeto y tienes que abrirte paso a más cosas. No me marco nada de aquí a mañana ni a pasado mañana; las cosas van surgiendo y, como te decía anteriormente, todo pasa por algo, las cosas en la vida no se imaginan sino que suceden, así que lo que tenga que venir, bienvenido sea. 

Si no hay investigación, no podemos avanzar en el cáncer; si no hay colaboración multidisciplinar, no avanzamos en el cáncer; y si los farmacéuticos no nos formamos, no avanzamos en el cáncer, con lo cual todavía queda mucho, mucho por hacer

 

—¿Cree que este proyecto ha llegado al máximo o todavía prevé una evolución importante? 

—Creo que, si hay que medirlo por metros, ha llegado a 5 centímetros; y si hay que medirlo por altitud, no ha llegado ni al techo. Siempre se dice que nunca se empieza la casa por el tejado, pero empezamos por el tejado porque tuve la suerte de que, gracias a las personas que estaban en el proyecto, se colocó en el segundo puesto a nivel mundial el primer año con el hashtag de #JuntosXElCáncer en redes sociales, con más de 35 millones de impresiones en redes. Ahora mismo, lo que se está edificando es que se hable de oncología en una farmacia, trabajando con el oncólogo y con la enfermera, y que el cuidador venga a la farmacia y diga que su familiar tiene cáncer y que el farmacéutico lo pueda ayudar. Pero es que no hay techo, porque si no hay investigación, no podemos avanzar en el cáncer; si no hay colaboración multidisciplinar, no avanzamos en el cáncer; y si los farmacéuticos no nos formamos, no avanzamos en el cáncer, con lo cual todavía queda mucho, mucho por hacer.  

—¿De qué manera cree que pueden ayudar movimientos como #JuntosXElCáncer? 

—Pueden ser un reflejo, sobre todo,  de una persona inquieta que quiere hacer algo en la vida. Cuando terminé la carrera quise hacer mil proyectos; escribía correos electrónicos a colegios, instituciones, revistas, etc., pero no me abrieron las puertas. Tuvo que llegar el momento de que a mi madre le diagnosticaran un cáncer para yo abrir las redes sociales, fijarme un perfil sanitario, pedir que hiciéramos un trabajo multidisciplinar, y ahí empezó. Si quieren lo pueden llamar éxito, o triunfo, o trabajo. Las personas que tengan ganas de hacer algo, que se fijen en eso. Si te apetece hacer algo y te nace del corazón, hazlo, métete a trabajar en lo que más te gusta, invéntate lo que te apetezca mientras te guste, seguro que puedes llegar lejos desde el corazón y con ganas. 

Para ver el vídeo completo de la entrevista pincha AQUÍ

 

JuntosXTuSalud

JuntosXTuSalud (www.juntosxtusalud.com) es un proyecto multidisciplinar de divulgación en salud que nació de la idea de guiar al estudiante, al profesional, al paciente y a su familia, al cuidador y al sanitario sobre distintas patologías mediante guías didácticas especializadas para este público. El objetivo de esta iniciativa es claro: hablar con profesionales sanitarios de distintas ramas sobre un tema tabú: el cáncer. A raíz de esto han surgido campañas como JuntosXElCáncer y JuntosXElCáncerdeMama, que han sido reconocidas con numerosos premios, siendo el más reciente de ellos el primer premio en la II Edición de los Premios a la Innovación Social 2023 Farmacéuticos y ODS del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF).