Hablamos con Jesús Aguilar poco tiempo después de que haya sido reelegido presidente del presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF). Las elecciones son, por tanto, el punto de partida, pero los planes de futuro se imponen con rapidez en la conversación.
– Me gustaría comenzar hablando de las elecciones. No es muy habitual que se presenten varias candidaturas.
– Sí, creo que hemos abierto un proceso democrático dentro de la profesión que, a lo mejor, tendría que haber sido mucho más habitual en los últimos años. Estos procesos democráticos son buenos, porque yo ahora me siento respaldado por ese 75% de los Colegios, de los compañeros, y siento que la labor que estamos haciendo, todo el trabajo que iniciamos hace tres años, tiene el respaldo de la profesión.
– ¿Qué lectura hace de los 13 votos que ha recibido Sergio Marco?
– Nosotros seguimos un proceso un tanto curioso, pues los que no somos presidentes y nos hemos presentado no votamos. Yo he presentado una candidatura de siete personas, de las cuales dos eran presidentes, y Sergio Marco presentó otra en la que había seis presidentes. Pero al final la lectura que hago es que seis compañeros han dado el apoyo a esa candidatura, frente a los 37 que han apoyado la que yo presidía.
En estas elecciones hemos abierto un proceso democrático dentro de la profesión que, a lo mejor, tendría que haber sido mucho más habitual en los últimos años
–¿Considera que el sistema de elección de presidente es el más adecuado?
– Es el proceso de elección que hay en todos los Consejos Generales y no es, por tanto, distinto al que tienen los abogados, los ingenieros industriales, los agrónomos, los químicos o los biólogos. Hay una ley nacional de Colegios profesionales, no de los farmacéuticos, donde se indica que los Consejos Generales los eligen los presidentes de los Colegios.
– ¿Cree que actualmente los Consejos Autonómicos están correctamente coordinados con el Consejo General?
– Cuando llegamos nosotros, hace aproximadamente seis años, creamos las Comisiones de Coordinación Autonómica. Esas Comisiones se reúnen casi todos los meses, y en ellas intentamos poner sobre la mesa todos los asuntos que preocupan a cada una de las comunidades autónomas. Todos los compañeros oyen los problemas que tienen en su comunidad a través de los presidentes autonómicos, y los comparten con el resto de las comunidades autónomas. Estas reuniones constituyen un foro muy importante de coordinación. Así lo hemos estado haciendo durante esta legislatura, y hay que destacar las ganas de todas las comunidades de querer compartir con el resto de los compañeros las iniciativas y las problemáticas de cada una de las comunidades. Nosotros, desde la presidencia de esas reuniones, lo que intentamos es coordinar e intentar que las cosas que son buenas para unas comunidades autónomas puedan serlo también para las otras. Aun así, en esta nueva legislatura, y con lo que hemos denominado cogobernanza, todavía intentaremos mantener más reuniones de trabajo.
– Imagino que esta cogobernanza ha sido muy bien acogida.
– En el último año hemos mantenido veintiséis reuniones con presidentes, entre los plenos, las reuniones de coordinación autonómica, las asambleas y las reuniones de presidentes. Creo que en algunos casos los presidentes están superinformados de todas las actividades que se realizan en el Consejo General, y en esas reuniones siempre se han marcado las líneas de trabajo y de actuación del Consejo General.
– En sus primeras declaraciones tras la elección dijo que los estatutos actuales solo provocan «inseguridad jurídica», y recordó que el 3 de diciembre de 2020 los presidentes se comprometieron a tener en el primer semestre de este año unos estatutos para poder debatir. ¿Va a ser así?
– Sí, éste es un compromiso que adquirimos el día 3 de diciembre pasado. Teníamos unos estatutos antiguos, con inseguridad jurídica según la opinión de los expertos, debido a que muchas leyes se habían aprobado con posterioridad a esos estatutos, y, por tanto, era el momento de hacer unos estatutos modernos, valientes y del siglo XXI. En aquella asamblea —y, por lo tanto, todo esto es anterior al proceso electoral— ya nos comprometimos a que, en el primer semestre de este año, tendríamos la base de unos nuevos estatutos. De hecho, el pasado 10 de junio se constituyó la Comisión para la elaboración de los nuevos estatutos.
– El eje principal de su programa era el desarrollo de la farmacia asistencial. ¿Qué significa ser más asistenciales? ¿Cómo se puede articular desde el CGCOF un plan de implantación concreta y práctica en las farmacias que permita evaluar los resultados en salud?
– Creo que podemos considerar dos momentos. El primero, hasta hace tres años, es la etapa en la que hablábamos de la atención farmacéutica y de tener que dar más servicios a las farmacias. Ese momento duró muchos años, posiblemente demasiados, en los que todas estas prácticas las estuvimos haciendo a través de estudios piloto y de universidades. Conseguimos tener unos datos apabullantes, desde el punto de vista de salud y económico, pero teníamos que ir más allá e intentar implantar estas prácticas, y ahí es cuando se inicia el segundo momento, que empezó hace unos tres años. Para poder implantar los servicios necesitábamos primero unas plataformas tecnológicas, porque difícilmente los podíamos aplicar si cada uno en su farmacia los hacía de manera descoordinada, sin protocolo de actuación y sin plataformas que gestionasen todos los datos.
En los tres últimos años hemos trabajado en una reforma del Consejo General muy importante, estructural, desde el punto de vista digital, para que las farmacias dejemos de trabajar de manera independiente y lo hagamos en red
»En los tres últimos años hemos creado estas plataformas y hemos trabajado en una reforma del Consejo General muy importante, estructural, desde el punto de vista digital, para que las farmacias dejemos de trabajar de manera independiente y lo hagamos en red.
»En estos momentos ya tenemos 33 colegios donde esas plataformas están siendo una realidad, y hemos creado la gran red de los FoCos, de los compañeros farmacéuticos que ayudan a los compañeros de las oficinas de farmacia a llevar a cabo de manera correcta estos programas.
»Hasta hace tres años, llevar a cabo la atención farmacéutica desde los sistemas que teníamos dentro del propio BOT Plus era un «dolor», podíamos tener que dedicar horas y horas para poder atender a un ciudadano y hacer algún seguimiento farmacoterapéutico o alguna adherencia. Ahora, en cambio, tenemos una herramienta gracias a la cual en el propio mostrador el farmacéutico puede hacer esa actividad y además queda perfectamente registrada también en red, lo que es muy importante. Ése es el cambio sustancial en el que hemos estado trabajando estos tres años y que ahora nos toca consolidar para que en los próximos tres sea una absoluta realidad en todas las farmacias españolas.
»De todas formas, creo que esos 33 Colegios, teniendo en cuenta que partíamos de cero colegios, es un número muy importante. Tenemos 52 provincias, con lo cual estamos en más de la mitad de las provincias españolas, y hay que considerar que esto siempre es voluntario, más allá de que los Colegios quieran adherirse a estos sistemas de Nodofarma Asistencial.
»Esto es la farmacia asistencial: primero, tener herramientas; segundo, tenerlo todo protocolizado; tercero, poder hacerlo en unos tiempos razonables, porque no podemos estar dedicándole cuatro veces más tiempo que el que le dedica el médico a la consulta de su propio paciente, y cuarto, tener una batería de datos con los que podamos hacer un buen trabajo asistencial con el ciudadano.
– En los últimos años el CGCOF ha hecho una inversión importante en comunicación e imagen. ¿Está satisfecho de los resultados?
– Yo creo que sí. Decía una exministra que «lo que no se pone en valor se pone en riesgo», y realmente lo que estamos intentando es poner en valor el papel del farmacéutico, ese papel tan importante que, además, con la pandemia, ha quedado meridianamente claro. De hecho, durante la pandemia hemos estado haciendo lo mismo que hacemos todos los días, pero es verdad que cuando no hay problemas nuestra labor es menos visible y se valora menos. Ahora, con la pandemia, es cuando los ciudadanos se han dado cuenta del gran papel que realiza el farmacéutico en todas las áreas. Durante muchos meses el farmacéutico ha sido el único profesional sanitario presente en algunas áreas. Todo esto hay que contarlo, porque si no lo cuentas, no existe. Yo creo que ése ha sido un poco el cambio fundamental que hemos hecho en el Consejo General. Teníamos que hacer un Consejo General mucho más abierto y mucho más transparente, y esto es lo que yo creo que hemos conseguido entre todos: un Consejo mucho más abierto, mucho más relacionado con otras organizaciones y con la sociedad, y que sigue siendo, tanto en lo asistencial como en lo social, un referente para los ciudadanos.
– Mantienen, además, una buena relación con los otros profesionales sanitarios.
– Tenemos una excelentísima relación con los médicos, con los veterinarios, con los dentistas... y con todos ellos estamos haciendo distintos tipos de proyectos que nunca se habían hecho desde el Consejo General, sobre todo con los médicos. La cantidad de proyectos en los que estamos trabajando es importante, y la relación que tenemos entre las organizaciones es estupenda; relación que, por cierto, se ha mantenido durante la pandemia. Donde sí ha habido conflictos es con el Consejo General de Enfermería.
– ¿Qué cambios prevé en el sector de la farmacia comunitaria durante su próxima legislatura?
– Primero, espero que no haya más cambios de ministros; llevamos siete ministros en los seis años que he sido presidente. Cuando explico esto, a continuación hago un silencio para que la gente pueda pensar bien lo que significa: lo de siete ministros en seis años refleja unas situaciones de país muy complicadas para poder seguir avanzando. Por tanto, lo primero que nos hace falta es cierta estabilidad política que nos permita definir qué es lo que quiere la Administración de nuestra profesión para los próximos años. Nosotros ese trabajo lo estamos finalizando con el Programa 2020-2030, en el que explicamos el camino por el que entendemos que debemos ir como farmacia, como farmacéuticos. Un camino que, además, estamos recorriendo de la mano de una serie de expertos muy importantes en el mundo de la sanidad y de todos los grupos políticos, desde Boi Ruiz hasta Pepe Martínez Olmos o el exministro García Vargas, por citar algunos. Ahora hace falta unir todo esto y hacerlo coincidir con la visión que tenga la Administración de lo que debe ser el farmacéutico del siglo XXI, con ese farmacéutico que entendemos nosotros mucho más implicado en todo lo que es el Sistema Nacional de Salud, independientemente de que seamos ese servicio privado, pero que tiene esa connotación pública tan importante y donde además el 80% de nuestro trabajo está dedicado al sistema público de salud.
Nos hace falta cierta estabilidad política que nos permita definir qué es lo que quiere la Administración de nuestra profesión para los próximos años
En las pasadas elecciones la candidatura de Jesús Aguilar logró 39 de los 52 votos posibles. Esta victoria ha supuesto para él repetir por tercera vez como presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos.