MATRICIUM®, de Bioderma, es el primer dispositivo médico regenerador celular y tisular cuya fórmula ‘imita’ los elementos de la matriz cutánea para devolverle al rostro ‘su mejor cara’.
K-alma, el nuevo tratamiento antiedad y antiestrés de Bella Aurora, es la solución para reparar los efectos del estrés y del cansancio en la piel y estimular su sistema de autodefensa.
ISDIN recomienda sus últimas innovaciones centradas en el cuidado del contorno de los ojos. Dos lanzamientos enfocados cada uno a tratar los diferentes problemas que pueden surgir en esta zona. K-Ox EYES trata en profundidad las ojeras y las bolsas, mientras que el nuevo Vital Eyes se centra más en las arrugas y el envejecimiento de la zona del contorno.
SOLITO es una marca de KRIIM, diseñada y producida a nivel nacional. Junto con RVOLUT y KHOI, las otras dos marcas propias que lidera, cada vez está más presente en las farmacias de toda España.
Welnig Organic Sanitizer, de Periche Profesional, es la apuesta de productos cosméticos higienizantes, de origen natural y de alta calidad para limpiar y proteger la piel y el cabello en profundidad. Sus fórmulas veganas están diseñadas para ofrecer lo mejor de la naturaleza para el cuidado diario personal.
En invierno la piel tiene que enfrentarse a mútiples agresiones durante el día como el frío, el viento, la contaminación, los rayos UV, etc. Factores que hacen que la piel se debilite rápidamente sufriendo una gran deshidratación.
Cumlaude Lab lanza Lubripiù Crema Íntima, crema vulvar hidratante y calmante de acción prolongada.
El uso de las mascarillas ha desatado una proliferación de rojeces en las pieles sensibles, dando como resultado, además de las manchitas rojas, sensación de ardor, escozor o picor. Para ponerle remedio, Bioderma cuenta con Sensibio AR, una crema para adultos y adolescentes que previene, trata y disminuye las rojeces, temporales o permanentes, dejando la piel suave, sin irritaciones (en calma) y 100% hidratada.
Todos los días nos enfrentamos a agresores externos como los cambios de temperatura, la contaminación y polución, los rayos UV, la luz azul, así como la excesiva carga de trabajo, momentos de estrés vitales o los propios cuidados inapropiados de la piel. También factores internos derivados de las relaciones interpersonales, la ansiedad, los pensamientos negativos, la falta de sueño, y los malos hábitos alimentarios que generan respuestas emocionales e impactan en el sistema nervioso, íntimamente ligado a la piel.
Con la edad, la piel pierde propiedades de forma gradual. Se vuelve más vulnerable a la radiación UV, al estrés, a la contaminación, etc. Su estructura se debilita y la flacidez se instala en nuestro rostro. Estos factores, junto a la continua contracción del tejido conectivo y muscular, provocan la aparición de las conocidas como arrugas de expresión. A continuación, se produce una pérdida de volumen de la piel en el óvalo facial, surco nasogeniano, ojeras…