Durante el encuentro, ambos presidentes han compartido su visión sobre el impacto de la pandemia en la sociedad. En este sentido, Pastor ha destacado «el compromiso irrenunciable de proteger el acceso a los medicamentos, en todas las zonas geográficas y en condiciones de igualdad» y ha añadido que «la universalidad en el acceso a los productos de salud constituye la espina dorsal del modelo farmacéutico».
En palabras de Baixauli, «esta universalidad debe tener su reflejo en el ámbito profesional, propiciando una farmacia abierta, social, que contribuye a resolver problemas y aportar soluciones que van desde la atención domiciliaria, pasando por la realización de pruebas y test clínicos hasta la orientación o derivación a otros profesionales ante síntomas menores del paciente».