Estos datos mejoran tras la recuperación sucesiva de los profesionales, cada vez más protegidos y se van produciendo reaperturas de farmacias gracias al establecimiento de turnos y bolsas de voluntarios por los colegios y consejos autonómicos, con el fin de garantizar el acceso a los medicamentos y la continuidad de la prestación farmacéutica.
Además, como se recordará, un total de 18 profesionales de las farmacias han fallecido en esta crisis sanitaria. Dieciséis farmacéuticos y 2 técnicos en farmacia que han perdido la vida en el ejercicio de su responsabilidad sanitaria, atendiendo a la población en primera línea asistencial, 11 procedentes de Madrid, 2 de Ciudad Real y el resto de La Rioja, Granada, A Coruña, Valencia y Alicante.
A pesar de la mejora de los datos y ante la desescalada, el Consejo General insiste firmemente en la necesidad de que se realice las pruebas de la COVID-19 a los profesionales de las farmacias. Adicionalmente el Consejo General sigue reiterando su petición al Instituto de Salud Carlos III para que se incluya los profesionales de las farmacias en el «Informe sobre la situación de COVID-19 en personal sanitario en España».