Richard Ford, para algunos el mejor escritor americano vivo, publicó en 2014 (un año después en España) su cuarta entrega protagonizada por Frank Bascombe, protagonista de tres novelas anteriores: El periodista deportivo, El día de la Independencia y Acción de Gracias. La cuarta se titula Francamente, Frank, un conjunto de cuatro nouvelles a mitad de camino entre el relato corto y la novela. Frank, el protagonista, tiene 68 años, ha superado su cáncer de próstata, tiene a su exmujer ingresada en un hospital con Parkinson, recuerda la pérdida de su hijo y tiene unas relaciones no demasiado fluidas con sus hijos vivos. Se ha jubilado y asiste desde el interior a la devastación causada en la costa por el huracán Sandy, que ha derruido cantidad de inmuebles vendidos por él, entre ellas su propia casa antes de que se trasladase al interior.